Obama dice que la decapitación no intimidará a Estados Unidos
Respuesta. Washington advierte que no olvidará el ‘horripilante’ acto contra Sotloff
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, aseguró ayer que la decapitación del periodista estadounidense, Steven Sotloff, a manos del grupo yihadista Estado Islámico (EI) no intimidará a su país y prometió que “se hará justicia”.
“Fue un acto de violencia horripilante. No olvidaremos ni nos van a intimidar. Aquellos que cometen el error de atacar a los norteamericanos, deben saber que nunca olvidaremos (…) y que se hará justicia”, aseveró Obama en rueda de prensa en Tallin, capital de Estonia.
Manifestó que el objetivo de Estados Unidos es garantizar que el Estado Islámico deje de ser una “amenaza” para Irak y para toda la región de Oriente Medio. Al igual que ocurriera con Al Qaeda y su líder, Osama bin Laden, la derrota del EI “requerirá tiempo y esfuerzo”, agregó.
El Consejo de Seguridad Nacional estadounidense ha confirmado la autenticidad del video que muestra la decapitación de Sotloff por el EI. “La comunidad de Inteligencia de Estados Unidos ha analizado el recién divulgado video del ciudadano estadounidense Steven Sotloff y ha llegado a la conclusión de que es auténtico”, dijo el Jefe de Estado.
En la grabación, titulada Un segundo mensaje a Estados Unidos, el verdugo de Sotloff atribuye su muerte a los ataques selectivos del Gobierno estadounidense contra posiciones del Estado Islámico en Irak, y amenaza de muerte a un tercer rehén, el británico David Haines. El video de Sotloff se divulgó apenas 13 días después de que el EI hiciera público otro que mostraba la decapitación del periodista estadounidense James Foley.
Imágenes. Sotloff, de 31 años y que supuestamente fue capturado en agosto de 2013 cerca de la frontera entre Siria y Turquía, aparece en las imágenes vestido con un mono naranja y arrodillado junto a su verdugo, en un escenario desértico muy similar al que aparecía en las imágenes de la decapitación de Foley que estremecieron hace dos semanas.
Washington sigue su ofensiva aérea que ha permitido a las fuerzas iraquíes y kurdas retomar a los yihadistas varias zonas al norte de Bagdad, entre ellas la ciudad de Amerli, asediada durante dos meses por el EI.
La Casa Blanca también indicó que se reunirá con los aliados de la OTAN para “desarrollar una coalición internacional para establecer una estrategia” y que continuará apoyando a Irak en su lucha contra el EI. En Bagdad, el parlamento celebró ayer una sesión de emergencia para hablar de los cerca de 1.700 soldados desaparecidos desde que se rindieron a las fuerzas del EI en junio.
Tras la publicación del video de la ejecución de Sotloff, Estados Unidos anunció el envío de otros 350 soldados a Irak, donde desde el 8 de agosto está llevando a cabo una ofensiva aérea contra los yihadistas. Estos soldados se unen a los 470 desplegados desde que el 9 de junio empezó la ofensiva yihadista en Irak.
Reacciones sobre el suceso
Londres
David Cameron calificó la decapitación de Sotloff de “asquerosa”; reunió a su gobierno en una sesión de emergencia.
Familia
La familia de Sotloff expresó su repudio a “la horrible tragedia” y dijo que lloraba “su muerte en la intimidad”.
Otro
Hay un tercer periodista, el británico David Cawthorne Haines amenazado por el Estado Islámico, según el video.
Foley
La escena es muy similar a la del video en el que se veía la decapitación de James Foley.
Reportero con más amor que miedo
EFE
Durante sus años de facultad en la Universidad Central de Florida, el reportero Steven Sotloff ya empezó a dar forma a su deseo de convertirse en corresponsal en Oriente Medio, un sueño al que no temía y que hizo realidad, pero por el que finalmente terminó perdiendo la vida.
El estadounidense, de 31 años, ha sido el segundo de los periodistas decapitado por el grupo yihadista Estado Islámico (EI) tras el comienzo de los bombardeos selectivos por parte de Estados Unidos contra sus posiciones en el norte de Irak, una muerte que, junto a la de su compañero James Foley, ha conmocionado al mundo.
Judío, nieto de supervivientes del Holocausto e incluso con nacionalidad también israelí, Sotloff viajó siendo muy joven a Yemen para comenzar a aprender árabe mientras compaginaba sus estudios de Periodismo, y aunque al finalizar la carrera pasó por algunas redacciones locales en Miami, no tardó en dar el salto a Oriente Medio, donde siempre había deseado trabajar. Libia, Egipto o Bahrein fueron algunos de sus destinos desde donde comenzó a escribir historias como periodista autónomo para diversas publicaciones, entre ellas las prestigiosas revistas Time o Foreign Policy, pese a saber que esa zona es una de las más peligrosas del planeta para ejercer su oficio.
Alentado por su valentía y su vocación como reportero de guerra, Sotloff trabajó en situaciones muy precarias y no especialmente bien pagadas, y pasó por situaciones comprometidas durante el estallido de la Primavera Árabe o la crisis Libia y la caída de Muamar Gadafi.
Emerson Lotzia Jr., compañero suyo durante la universidad, explica que Sotloff no se dejó nunca intimidar por los riesgos que planteaba la región, aunque era plenamente consciente de ellos. “Un millón de personas podrían haberle dicho que lo que estaba haciendo era una locura, era lo que nos parecía a nosotros mirando desde fuera, pero a él era lo que le gustaba hacer y no iban a detenerlo”, relató Lotzia al periódico de su facultad, el Central Florida Future, para el que el propio Sotloff colaboró.
Hasta la publicación del video de la decapitación de Foley, hace poco más de dos semanas, poco se sabía del paradero de Sotloff desde hacía un año, cuando se cree que fue capturado por los terroristas en las proximidades de la ciudad de Aleppo, en Siria, cuando informaba sobre la guerra civil que vive ese país.