Monseñor Oscar Aparicio fue posesionado como Arzobispo de Cochabamba
El nuevo Arzobispo agradeció el recibimiento que le brindó la arquidiócesis cochabambina y manifestó que asumirá el trabajo evangelizador de la iglesia con la seguridad de ser el sucesor de un trabajo pastoral impecable
Monseñor Oscar Aparicio Céspedes fue posesionado este martes como Arzobispo de Cochabamba en reemplazo de monseñor Tito Solari por decisión del Papa Francisco. La liturgia de posesión fue realizada en la Catedral Metropolitana de Cochabamba.
Durante la ceremonia se procedió a leer la Bula papal donde el Santo Padre expresa la aceptación de la renuncia de monseñor Tito Solari que en septiembre de 2014 cumplió 75 años y donde nombra a monseñor Aparicio, quien cumplía el mandato de Obispo Castrense de Bolivia.
«A ti venerable hermano adornado de evidente s cualidades y experto en cosas sagradas hemos juzgado apto para gobernarla, por consiguiente, en el desempeño de nuestra suprema potestad de servicio y después de haber consultado a la congregación de obispo te desligamos del cargo de ordinario militar y te nombramos Arzobispo Metropolitano de Cochabamba con todos los derechos y obligaciones que esto supone», expresa parte de la Bula pontificia.
Monseñor Tito Solari agradeció a la iglesia Diocesana de Cochabamba, al clero diocesano y dio la bienvenida al nuevo obispo de Cochabamba, además pidió oraciones para que monseñor Aparicio se fortalezca en la nueva misión que se le ha sido encomendada.
«Deseo agradecer infinitamente a Dios por estos años que me ha permitido compartir con ustedes a través de mi ministerio pastoral (…) asimismo, les pido disculpas por mis limitaciones y defectos (…) La Virgen de Urcupiña acompañe con su intersección a monseñor Aparicio para que anime a la iglesia a servir en este escenario global que presenta siempre nuevos desafío «, manifestó Solari.
Por su parte, el nuevo Arzobispo de Cochabamba, agradeció el recibimiento que le brindó la arquidiócesis cochabambina y manifestó asumirá el trabajo evangelizador de la iglesia cochabambina con la seguridad de ser el sucesor de un trabajo pastoral impecable y que continuará este camino.
«Vengo confiado en que el trabajo evangelizador en esta iglesia local de Cochabamba no comienza conmigo. Yo soy el continuador y heredero de una serie de hombres admirables por su trabajo apostólico y su piedad () traigo puesta la confianza en mis queridos colaboradores cercanos sabiendo que contaré con su experiencia, consejos, cercanía y amistad», dijo Aparicio.