Morales promueve en el Consejo de Seguridad la solución pacífica de los conflictos por recursos hídricos
El presidente Evo Morales afirmó en el Consejo de Seguridad de la ONU que los Estados no deben tomar medidas unilaterales que afecten los recursos transfronterizos
El presidente Evo Morales presidió este martes el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y enfocó su discurso en la importancia de preservar el agua y evitar que se convierta en un factor de conflicto. Llamó a los Estados a no adoptar “medidas unilaterales” que pongan en riesgo los recursos hídricos transfronterizos, aquellos que pasan de un Estado a otro, y apelar a las vías pacíficas en caso de controversia.
“Los Estados, como reza la Carta de las Naciones Unidas, tienen la obligación de buscar soluciones a sus controversias a través de la negociación, la investigación, la mediación, conciliación, el arbitraje el derecho jurídico…y otros medios pacíficos como los buenos oficios”, planteó en un decálogo de reflexiones sobre la importancia del recurso para la vida.
Bolivia comparte con sus vecinos, entre ellos Chile, recursos hídricos transfronterizos. El río Lauca cruza ambos países y en 1961 Chile, pese a notas y comunicaciones de Bolivia, inauguró las obras de construcción que desviaron el caudal provocando la disminución del caudal en el lado boliviano con una serie de perjuicios para las comunidades ribereñas.
Ambos países también enfrentan un diferendo por el agua del Silala, ubicado en la zona de frontera, y que fue desviado artificialmente por Chile hace más de 100 años sin ningún tipo de compensación. Santiago llevó el caso a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) con el argumento de que el recurso es parte de un río internacional, lo que Bolivia niega con el argumento de que se trata de aguas provenientes de manantiales.
“Los Estados deben abstenerse de adoptar medidas unilaterales que pongan en riesgo o afecten derecho de otros Estados que comparten recursos hídricos transfronterizos”, propuso en otra parte de su reflexión en la sesión que tiene, precisamente, como agenda el mantenimiento de la paz y seguridad internacional, diplomacia preventiva y aguas transfronterizas.
Bolivia asumió la presidencia del Consejo de Seguridad de la ONU durante el mes de junio. El embajador Sacha Llorenti asumió esta misión.
La crisis del agua es una de las más grandes amenazas que enfrenta la vida en el planeta, los organismos de las Naciones Unidas en base a sus respectivos mandatos deben redoblar los esfuerzos para que juntos la enfrentemos”, sostuvo el mandatario en una sesión en la que los que intervinieron hablaron sobre la importancia del recurso hídrico.
Morales recordó que desde 1947 se registraron 37 conflictivos relacionados con el agua y advirtió que al 2050 la demanda del recurso subirá en 54%. “El agua dulce no tiene sustituto alguno, sin agua no hay vida”, insistió. (06/06/2017)