Christophe Galtier, un entrenador exitoso en Francia
Christophe Galtier, el nuevo conductor del París SG
El amor por el fútbol se lo debe a su padre policía, que trabajaba en la seguridad de estadios. Gracias a eso pudo asistir a sus primeros partidos
Proclamándose campeón de la liga de fútbol de Francia por primera vez, en 2021 con el Lille, Christophe Galtier vio recompensado su talento para dirigir a un grupo heterogéneo, aprovechando su experiencia como jugador y entrenador en distintos puntos de su país, lo que le ha hecho ganar prestigio en los últimos años.
A ese título de Ligue 1 en el Lille en 2021, la sumó ser finalista de Copa de Francia en 2022, con el también modesto Niza, en su primera y única temporada en la Costa Azul.
Con reputación de gran estratega y buen comunicador, este exdefensa responde al perfil de un técnico moderno. Su adaptabilidad le ha permitido también superar las sacudidas internas del club sin perder el rumbo, a pesar de que teóricamente le faltaban horas de vuelo en los banquillos, tras haber entrenado únicamente al Saint-Etienne antes de su llegada al Lille.
Cuando aterrizó en el club del norte del país en diciembre de 2017, pocos podían pensar que iba a ser el entrenador llamado a devolver al Lille a lo más alto. Entonces la misión era la permanencia.
Su llegada fue un revulsivo. En su primera temporada completa (2018-2019), el Lille fue segundo en la clasificación final y en el curso siguiente, marcado por un final anticipado del campeonato por la pandemia del covid-19, fue cuarto.
En la temporada 2020-2021, Galtier y el Lille dieron el gran salto. Se convirtió en el tercer entrenador en poder ganar la Ligue 1 frente al todopoderoso París Saint-Germain y su dinero catarí, después de René Girard con el Montpellier (2012) y Leonardo Jardim con el Mónaco (2017).
Enamorado del fútbol
Galtier, marsellés, conocía ya el norte de Francia y Lille, donde jugó en los años 1980.
En el Saint-Etienne (2009-2017) estaba plenamente implicado en la política de fichajes y en el Lille vio cómo había una estructura que le era ajena.
Luis Campos, asesor del presidente Gerard López en Lille y su valedor en el PSG, donde el portugués ha sustituido al brasileño Leonardo, se ocupaba de construir el plantel mientras que él gestionaba la parte más directamente ligada con lo que ocurre en el terreno de juego.
Ese funcionamiento interno no desvió a Galtier de su trabajo, pese a que el Lille fue desprendiéndose de sus mejores jugadores (Nicolas Pepé, Rafael Leao, Victor Osimhen…).
El sistema no varió con la llegada a finales de diciembre de Olivier Letang a la presidencia.
«Me mantengo concentrado en mi grupo, en el vestuario, en el equipo que está detrás del equipo», afirmó Galtier a finales de enero.
Con 55 años, Galtier es un personaje conocido en Francia aunque no mucho fuera del país en el que ha desarrollado casi toda su carrera. Como jugador, empezó en el Marsella y jugó también para Lille, Toulouse, Angers y Nimes.
Como jugador tuvo una experiencia final (1997-1998) en Italia, en el Monza. Como técnico adjunto se curtió en Emiratos Árabes Unidos, Grecia e Inglaterra, antes de su carrera como entrenador principal, ya en Francia.
El amor por el fútbol se lo debe a su padre policía, que trabajaba en la seguridad de estadios. Gracias a eso pudo asistir a sus primeros partidos cuando tenía apenas dos años de edad.
En Lyon primero y luego en Marsella, donde era un habitual del estadio Velodrome, antes de pasar a formar parte del centro de formación del Olympique de Marsella.
Una juventud feliz, al borde del mar Mediterráneo, con Johan Cruyff y la Francia de Michel Platini como referentes.
(05/07/2022)