‘Deudas por aquí y por allá’
Hace días, mientras almorzaba veía en titulares, redes sociales, medios de comunicación, etcétera, al senador de Comunidad Ciudadana (CC) Rodrigo Paz Pereira; señalaba que el país ya no está en condiciones de asumir más deudas y que el dinero se estaría utilizando para otros fines. Me llamó la atención cómo se expresaba sobre la deuda pública nacional, hacía ver que el endeudamiento es malo; es por esa razón que decidí indagar un poco sobre la gestión de quien era alcalde del municipio de Tarija en el periodo de 2015 a 2020, me refiero al senador Paz.
El Servicio de la Deuda (SD) es entendida como el pago que debe hacer la persona o institución que haya adquirido una o más deudas a una institución financiera, en un periodo de tiempo determinado.
Según la página web del Ministerio de Economía, antes que ingrese Paz a la Alcaldía de Tarija, en 2015, el presupuesto para el SD llegaba a Bs 1,9 millones; en 2016 y 2017 se incrementó a Bs 2,5 millones; en 2018 a Bs 4,3 millones; en 2019 a Bs 12 millones y finalmente, en 2020 alcanzó a Bs 30,2 millones, es decir que de 2015 a 2020 el exalcalde incrementó la deuda exponencialmente, en un 1.489%, de Bs 1,9 millones a Bs 30,2 millones. Ahora bien, haciendo un ejercicio aritmético como lo hace el senador Paz y sus colegas que critican la deuda pública, según el Censo de Población y Vivienda 2012, el municipio de Tarija (Cercado) cuenta con 205.375 habitantes y dividiendo el SD de 2020, de Bs 30,2 millones entre la población, se tiene que cada tarijeño debe pagar un monto de Bs 147, es decir que dejó endeudados a los tarijeños durante varios años, puesto que estos recursos serán cubiertos con los impuestos que pagan los ciudadanos de ese municipio.
Por otro lado, respecto al pago de sueldos y salarios al personal de planta, eventual y consultores en el municipio de Tarija, se tiene que en 2015 el presupuesto para este fin ascendía a Bs 69,3 millones; sin embargo, para 2020 llegó a Bs 82,9 millones, es decir un aumento del 20%, equivalente a Bs 13,6 millones adicionales. Se puede deducir que, a medida que crecía el SD, también crecían los gastos en sueldos y salarios. De los datos expuestos, el municipio de Tarija, al frente del senador Paz, incurrió en créditos, es decir se prestó platita para financiar sus gastos y no solamente sobrevivía de las transferencias que realiza el nivel central del Estado por concepto de coparticipación tributaria y el Impuesto Directo a los Hidrocarburos; por tanto, uno se pregunta ¿con qué moral uno critica?, lo más sano es tomar conciencia de lo que se hizo cuando era autoridad a la hora de criticar alguna medida y no es correcto satanizar una deuda pública, y menos si el destino final es para financiar proyectos de inversión, que benefician directamente a la población.
Gran parte de la deuda pública interna y externa que contrae el Gobierno es principalmente para ejecutar proyectos de inversión pública (en infraestructura, caminos, sector productivo, viviendas, etc.), con el fin de contribuir a dinamizar la economía del país y como consecuencia de esas medidas y otras, se tiene el nivel de pobreza más bajo que se haya registrado en la historia del país, el nivel de desigualdad más bajo que se ha logrado, el nivel de empleo más alto que se haya conseguido con 4,6 millones de personas ocupadas, la tasa de inflación más baja de la región, entre otros resultados positivos.
Rómer Bello Bernal es economista.