Ante la demanda penal interpuesta por el Comando General de la Policía en contra de tres dirigentes cocaleros, por el desalojo de uniformados de Shinahota, Omar Claros, dirigente de la Federación Sindical de Trabajadores Campesinos del Trópico de Cochabamba, informó que “las bases decidirán” cómo responder a este proceso judicial.
“No sabemos de esa demanda, pero nuestras bases deciden, nosotros solo somos portavoces, ellos deciden, están preparados”, advirtió Claros.
El dirigente campesino calificó de “absurda” la demanda en contra de los dirigentes. “Ellos (desde el Gobierno) nos tratan de todo, de salvajes, de tener cuero de oveja, de delincuentes o traficantes, esto está por demás”, dijo y aseguró que sus acciones responden al mandato de la población.
El 16 de abril, Claros, al igual que otros dirigentes de las Seis Federaciones del Trópico, en contacto con radio Kawsachun Coca, informó que “las bases, han dado 24 horas para que la Policía abandone el trópico de Cochabamba porque ellos no han respetado los protocolos de la cuarentena. El pueblo está dolido, acá deciden las bases y ellos han dicho que no van a permitir el regreso de los uniformados”.
Día antes, 85 policías ingresaron al trópico cochabambino, a los municipios de Villa Tunari, Chimoré y Shinahota, para reponer el servicio interrumpido en octubre de 2019, durante los conflictos poselectorales.
Dado el plazo, los pobladores de Shinahota expulsaron al grupo de uniformados que llegó a esa localidad, lo hicieron por la noche y en medio de agresiones físicas y verbales. Por esta acción, “el comandante nacional de la Policía, general Rodolfo Montero, presentó la querella en contra de tres dirigentes cocaleros”, informó el director Jurídico del Ministerio de Gobierno, Roberto Barbosa.
“Estamos calmando a las bases, nosotros dimos un plazo, si hubiéramos soltado a las bases, autoconvocadas, qué habría pasado, nosotros más bien estamos cuidando a los policías”, sostuvo Claros.
Aseguró que hay temor por las represalias del Gobierno. “Ya estamos decididos, morir o vivir uno no más es”, añadió e indicó que la Policía llegó al trópico sin la coordinación respectiva, en plena cuarentena. “Nosotros somos respetuosos, disciplinados, ellos nomás nos tratan de salvajes, de delincuentes, nos amenazan, pero sabremos dónde responder. Ellos han roto protocolos, estoy investigando, hay entre dos, hasta cuatro policías infectados y ahí el pueblo va a reaccionar”, agregó.