Vendedores ambulantes luchan por sobrevivir a la cuarentena
Algunos decidieron vender barbijos y alcohol en gel, otros se levantan de madrugada para vender sus productos para eludir los controles y hay quienes no accederán a los bonos que otorga el Gobierno por falta de documentación.
Carlos, de 16 años, sale de lunes a viernes a las 04.30 de su casa con su caja de chocolates bajo el brazo para comercializarlos en los mercados de La Paz.
A pesar de que la Alcaldía de La Paz dispuso hace ya 11 días que los vendedores en vía pública solo pueden salir un solo día a la semana en función de su número de carnet, el adolescente sostiene que, de momento, ésta es su única fuente de ingresos para ayudar a su madre que está enferma y a sus hermanos menores.
Como él, otros vendedores ambulantes usan esta estrategia para “intentar vender algo” mientras dure la cuarentena, ya que debido a las restricciones sus ingresos cayeron o simplemente no los perciben.
Comerciantes
Cerca de 1.000 personas formaron la Asociación de Comerciantes Ambulantes integrada por lustrabotas, personas que limpian los vidrios de motorizados, vendedores de gelatinas y otros
En declaraciones a La Razón, Richard Ramos, su secretario general, explicó que el 90% no puede vender debido a la cuarentena.
Tania, por ejemplo, quien solía vender gelatina por la avenida 16 de Julio y obtenía por día un ingreso de Bs 50, hoy apenas logra Bs 10.
Y pese a que aproximadamente el 80% de sus asociados podrá acceder al Bono Universal del Gobierno –Bs 500 para quienes no cuenten con ingresos ni cobren alguna renta o bono—, un 20% quedará la margen pues no cuenta con carnet de identidad ni otra documentación.
“Pareciera no ser cierto, pero es verdad, hay gente que no cuenta con su documentación; pedimos ayuda de la población (…). Estamos pasando una grave situación. Lamentablemente, ya no estamos saliendo a las calles, ganamos al día y tenemos familia. Los 500 no todos podrán obtenerlo”.
Regulación
Sin embargo, en este grupo también hay quienes cumplen la regulación edil y salen a comerciar por su zona el día que les toca. Entre ellos hay quienes cambiaron de rubro y hoy venden barbijos, alcohol y alcohol en gel para adaptarse a la demanda y no tropezar con los controles municipales. Pero no son todos, solo los que tienen “algo de capital”, precisa el dirigente.
Según una evaluación técnica y socioeconómicq de la Dirección de Política Social de la Gobernación de La Paz, presentada el 24 de abril, las personas indocumentadas están excluidas de los bonos creados que distribuirá el Gobierno.
Algunos integrantes de la asociación recibieron cebollas y zanahorias donadas por la Policía la mañana del lunes 27.
Carlos también recibió su parte, que la cargó en su mochila. Dijo que intentaría vender sus chocolates unas horas más, antes de retornar a su domicilio situado en una ladera.