Once sindicatos, las cooperativas y una de las asociaciones del transporte libre formaron una comisión denominada Unidad del Transporte Urbano Paceño, que procura renegociar con el Gobierno Autónomo Municipal de La Paz las restricciones para limitar la cantidad de vehículos en circulación, de pasajeros por vehículo con el fin de prevenir el contagio con el COVID-19.
A las 11.00 sostendrán una primera reunión con Ramiro Burgos, secretario municipal de Vialidad, en la que abordarán al menos cinco demandas claves, informó Lucio Quispe, secretario general del sindicato Avaroa.
Él es el gestor de la comisión que podría convertirse en una entidad que se equipare con la Federación Andina de Choferes de El Alto y que defienda los intereses de los operadores urbanos de la sede de gobierno.
Protocolo
El protocolo de bioseguridad que se aplica desde el lunes 1 de junio, y que permitió la reanudación del servicio, fue consensuado con Rubén Sánchez, secretario ejecutivo de la Federación Departamental de Choferes 1ro. De Mayo de La Paz, y Freddy Quispe, de la Central Única del Transporte Urbano de Pasajeros (Cutup). Ambos, del sector sindicalizado.
“Lo han manejado a título personal a nombre de nosotros (…). El señor Sánchez, que representa al nivel departamental, ha firmado acuerdos con la Alcaldía que han perjudicado principalmente a trufis y carrys”.
La primera tarea que se impuso la comisión es renegociar con el gobierno local las condiciones en las que permitió el retorno al trabajo de los transportistas urbanos, sindicalizados, cooperativistas y libres.
La primera es aumentar del 40% al 50% la cantidad de los motorizados que prestan el servicio a diario para, según Lucio Quispe, cubrir la demanda insatisfecha. Actualmente está en vigente la restricción vehicular de seis números por día para que solo pueda operar el 40% de los motorizados.
Restricciones
Esta demanda está vinculada también con levantar la restricción vehicular a micros y colectivos, para que quienes prestan este servicio operen en igualdad de condiciones que el servicio municipal de transporte LaPazBUS.
La tercera es lograr que la Secretaría de Vialidad acepte el “noveno pasajero” para los minibuses, que, según el protocolo elevado a rango de ley municipal, solo pueden transportar a ocho usuarios para garantizar la distancia de un metro y medio entre ellos.
Y la cuarta es que carrys y trufis, que por la pandemia solo pueden trasladar a tres pasajeros aumenten a cuatro e incluso a cinco. En este fin dijo que en la reunión de este viernes plantearán que los carrys puedan modificar la disposición de los asientos. “Podemos ponerlos frente a frente, como en (las cabinas) del teleférico”, dijo.
Según el dirigente, con estas cuatro medidas lo que pretenden es que sus afiliados puedan cubrir el costo de operaciones y obtener fondos para alimentar a sus familias, quienes con la restricción por el número de placas solo pueden salir a trabajar dos veces a la semana, su capacidad de transporte se redujo en 40% por la inhabilitación de asientos, y deben correr con gastos adicionales, como los atomizadores y el alcohol en gel.
La quinta demanda es que las autoridades les den un plazo adicional para habilitar las ventanillas. “Tememos que sean sancionados”, explicó Quispe. (05/06/2020)