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El megarrastrillaje avanza pero choca con negocios abiertos y vecinos reticentes

Con 600 brigadas desplegadas en el municipio de La Paz, las actividades del megarrastrillaje avanzan a buen ritmo en los distritos urbanos y rurales, que si bien de manera general reciben de manera positiva al personal, aún hay quienes se niegan a acatar las restricciones y las evaluaciones.

«Hemos tropezado con algunas pequeñas dificultades que en base al diálogo se han ido resolviendo, uno es, por ejemplo, que en el macrodistrito Cotahuma hemos visto mucha gente circulando en la avenida Buenos Aires y varios negocios abiertos», informó el director de Comunicación de la Gobernación de La Paz, Edgar Ramos.

Otro inconveniente que sufrieron las brigadas es que algunos vecinos se negaron a recibirlas, cerraron sus puertas y no aceptaron ser evaluados. «Sobre este tema queremos agradecer a los dirigentes que han ayudado mucho a que las familias nos atiendan, por eso queremos recomendar a la población que esté atenta a la visita de los equipos médicos y, además, que las pruebas y kits de medicamentos tienen una finalidad clínica-médica, no se va a entregar a dirigentes o porque son conocidos del barrio», explicó Ramos.

A pesar de estos inconvenientes los resultados son positivos hasta la media jornada de trabajo, pues se estima que un 90% de las actividades y recorridos programados se ejecutan en los tiempos establecidos.

«La movilización es muy grande, queremos agradecer y reconocer a la Alcaldía de La Paz, a la Policía, Fuerzas Armadas, al Instituto Nacional de Estadística (INE) y a todas las instituciones que están apoyando».

Los megarrastrillajes empezaron hoy viernes en el municipio de La Paz y durarán hasta el domingo 22; la segunda etapa será la próxima semana, entre el viernes 28 y domingo 30 de agosto. En estos seis días está prohibida la circulación peatonal y vehicular, así como el funcionamiento de negocios.

Con la actividad se planifica atender a unos 400.000 vecinos, equivalentes al 43 % de la población del municipio, y aplicar al menos 20.000 pruebas rápidas de COVID-19.

El objetivo es detectar a tiempo casos positivos de coronavirus, para aislarlos, cortar la cadena de contagios y permitir reducir al menos al 50 % la cantidad de casos diarios que se registren a finales de mes y principios de septiembre. Las brigadas también repartirán 100.000 paquetes de medicamentos para las familias que requieran el tratamiento.

Las autoridades recomendaron a los vecinos quedarse en casa y responder con honestidad a las preguntas al personal de las brigadas, que antes de los recorridos fue sometido a pruebas de COVID-19 y revisiones médicas.

(21/08/2020)