La capacidad de cremaciones en dos hornos del Cementerio General fue rebasada ante el aumento de fallecidos a causa del COVID-19. Según la programación del camposanto, hasta el viernes se planea cremar 40 cuerpos y hay otros 28 que están en espera o fuera de esa lista.
“Nuestra capacidad de cremación ha sido rebasada, tenemos 40 cuerpos esperando para ser cremados, pero la gente afuera no se da cuenta, no se da cuenta que esta enfermedad está matando y siguen, siguen aferrándose al jolgorio, aferrándose a la irresponsabilidad”, dijo el alcalde Iván Arias, en una inspección realizada la noche del lunes.
La directora del Cementerio General, Érika Endara, recordó que el cementerio paceño cuenta con dos hornos con capacidad para cremar 10 cuerpos por día. Con el aumento de la demanda, el número de cremaciones subió a 12 por día en algunas jornadas, lo que obliga a tomar medidas de ampliación de espacios.
Endara repitió que hay 40 cuerpos programados hasta el viernes 25 y otros 28 están fuera de esa lista. Anunció que en la medida que se vaya cremando los que ya están previstos, los otros serán parte de la nómina oficial.
Varias familias aguardan en las afueras del camposanto paceño en busca de un espacio para enterrar a sus difuntos.
El alcalde adelantó que verá la posibilidad de comprar otro horno para enfrentar una posible cuarta ola del COVID-19. “Vamos a tomar medidas para acelerar la capacidad de nuestros crematorios, quizá a futuro vamos a comprar un nuevo crematorio”.
Explicó que el cementerio cuenta con 140 nichos y sarcófagos solo para difuntos COVID-19. “El gobierno municipal está tomando las debidas previsiones para que no nos pille en curva, ojalá nunca usemos, porque no es acá donde tenemos que terminar, tenemos que terminar trabajando, reactivando la economía; estamos preparados para la muerte, pero es más importante estar preparados para la vida y por eso tenemos que cumplir las restricciones”.
Arias precisó que los referidos nichos para difuntos de COVID-19 están reforzados y no se pueden abrir en un tiempo de cinco años.
“Tomamos las medidas necesarias para evitar colapsar, trabajando a full, excediendo las 12 cremaciones por día para llegar a cubrir la demanda que tenemos. Se está previendo abrir el Cuartel 323, que tiene 83 nichos y 125 sarcófagos, si se rebalsa nuestra capacidad el miércoles”, dijo Endara, a tiempo de señalar que esta medida busca evitar que los familiares sufran por tener varios días a sus seres queridos en la morgue o en funerarias por falta de espacio.
Endara confirmó que en el caso de los entierros de personas que fallecieron por COVID-19 solo pueden ingresar dos familiares “para dar el último adiós”. La autoridad aprovechó la oportunidad para informar a la población que con solo la presentación del carnet de identidad y el certificado de defunción se pueden realizar las cremaciones sin necesidad de ir a la funeraria y por un costo de Bs 701.