Universidades públicas y congreso de educación
A menos de dos meses para la realización del Congreso Plurinacional de Educación, el Ministerio de Educación se encuentra inmerso en el desarrollo de eventos distritales y departamentales. En estos encuentros, basados en un temario previamente establecido por el ministerio, los delegados regionales analizan diversas temáticas centradas principalmente en el ámbito de la educación regular.
Entre los aspectos más destacados de esta etapa preparatoria se encuentran:
Falta de documentación oficial accesible: No se han publicado documentos oficiales por parte de las autoridades educativas, o bien, no son accesibles al público.
Ausencia de un diagnóstico sólido: No se cuenta con una propuesta base del Ministerio de Educación que incluya estadísticas, indicadores e información sustancial para realizar un diagnóstico del estado actual de la educación.
Incertidumbre sobre la Ley 070: No hay claridad sobre las propuestas para modificar, ajustar o profundizar la Ley 070, mucho menos en lo que respecta a los aspectos curriculares.
Desigual participación de actores educativos: La participación de los diversos actores educativos es dispar. Predominan los representantes del magisterio urbano y rural, mientras que la representación de los pueblos y naciones indígena originario campesinos, padres de familia, estudiantes de Formación de Maestros, y otros sectores, como la sociedad civil e iglesias, es limitada.
Ausencia de las universidades públicas y autónomas: A pesar de que el Ministerio de Educación ha señalado la participación del Comité Ejecutivo de la Universidad Boliviana, la ausencia de las universidades públicas y autónomas en estos eventos preparatorios es notoria.
Esta última ausencia es especialmente preocupante, ya que es inconcebible plantear un congreso educativo sin la participación del sistema universitario público y autónomo, dada su responsabilidad en la educación superior dentro del Estado Plurinacional de Bolivia. De la misma manera que es fundamental considerar la opinión de maestros, estudiantes, familias, comunidades, organizaciones indígenas y otros sectores sociales, es imprescindible incluir a las instituciones que se encargan de la formación profesional, la investigación y el desarrollo científico y tecnológico.
Cabe destacar que la falta de participación universitaria no solo preocupa por su ausencia, sino también por el aparente desinterés del propio sistema universitario respecto al Congreso Plurinacional de Educación. No se ha encontrado evidencia de participación de autoridades universitarias ni de representantes de las carreras de educación, mucho menos de otras áreas académicas esenciales para articular la educación regular con la formación universitaria.
En años anteriores (UMSA), se promovieron eventos que buscaban integrar el nivel universitario en la revisión, evaluación y propuesta curricular del nivel secundario. Otro ejemplo fue el aporte de la UMSS en el desarrollo de prácticas de laboratorio adaptadas para su aplicación en unidades educativas de secundaria en áreas rurales.
Una de las experiencias más valiosas en estos esfuerzos de integración educativa fueron las Olimpiadas Científicas, que, siendo una iniciativa universitaria, se expandieron a todo el nivel secundario, involucrando a más de 400.000 estudiantes. Este evento sirvió como un mecanismo para promover las ciencias en la educación secundaria. Sin embargo, esfuerzos de este tipo, aunque valiosos, corren el riesgo de quedar en el olvido si no se proyectan como políticas públicas sostenidas y progresivas.
La ausencia de las universidades públicas y autónomas en los eventos preparatorios del Congreso de noviembre, así como el aparente desinterés del sistema universitario en generar espacios de discusión tanto internos como externos sobre la educación, sugieren que la desconexión entre la educación regular y la superior podría persistir, en detrimento del desarrollo de la educación plurinacional. Hasta ahora, esta desconexión ha presentado una educación fragmentada y dispersa, en lugar de una estructura articulada, continua y coherente que favorezca, de manera imprescindible, la comprensión integral del sistema educativo boliviano.
Roberto Aguilar Gómez es docente investigador de la UMSA y exministro de Educación.