Así lo aseguró el gerente de Asuntos Legales de Jindal Steel Bolivia (JSB), Jorge Gallardo, a tiempo de agregar que este año se tiene proyectado suscribir todos los contratos para la compra de las plantas del complejo metalúrgico.
«Hemos superado el nivel de inversión proyectado para el primer semestre de operaciones —que era de $us 120 millones— y hemos alcanzado los $us 145 millones», informó Gallardo a La Razón.
El 18 de julio del 2007, el Estado y Jindal suscribieron un contrato de riesgo compartido para la explotación del Mutún. En el contrato, JSB se compromete a invertir $us 600 millones en los dos primeros años de operaciones, $us 1.500 millones hasta el quinto y otros $us 600 millones hasta el séptimo.
«Hasta abril del 2012 ya tenemos que llegar más o menos a los $us 600 millones. Estamos trabajando en ello», dijo Gallardo. De acuerdo con las cifras, la siderúrgica india ya invirtió, hasta marzo, el 24,16% de lo comprometido.
El 30 de marzo, JSB depositó a la Empresa Siderúrgica Mutún (ESM) $us 1 millón como parte de la segunda cuota de pago por el derecho de explotación de hierro.
Un día después, el superintendente de Jindal, René Soria Galvarro, informó que la empresa cuenta con una reserva de 250.000 t de hierro triturado de alta pureza (mineral secundario) que todavía no se pudo exportar por problemas de logística en el transporte.
Exportación. El lunes, el ministro de Minería y Metalurgia, José Pimentel, afirmó que la siderúrgica india debía cumplir con el contrato de riesgo compartido antes de exportar el mineral. El documento señala que la relación de los contenidos de exportación debe ser de 30% de mineral primario y 70% de secundario.
«La pretensión de Jindal de exportar simplemente mineral secundario está en contra del contrato (…). Nosotros no tenemos conocimiento de que se haya iniciado la explotación de mineral primario», dijo la autoridad.
Gallardo replicó que «se cumplieron con todos los requerimientos contractuales» para iniciar la exportación del mineral.
El Plan de Producción Anticipada 2010-2014, explicó, establece que el primer año se explotará en toneladas 1 millón (90% mineral secundario); el segundo 2 millones (75% secundario); y el tercer año 23 millones (90% primario).
«Según contrato, el parámetro de 70/30 se lo calcula cada tres años. Si respetamos los porcentajes mencionados cumpliremos con el mismo», manifestó.