La ministra de Salud, Nila Heredia, informó ayer que tras haber declarado «ilegal» el paro de los trabajadores de la Caja Nacional de Salud (CNS), su despacho instruyó ejecutar los descuentos por los días no trabajados. La dirigencia del sector advierte que, de concretarse la medida, iniciarán una huelga de hambre dura.
«Hoy (ayer) hemos recibido la resolución del Ministerio de Trabajo que declara ilegal el paro. Estamos mandando la nota al Gerente de la Caja Nacional de Salud para que proceda con los descuentos», anunció Heredia.
Al respecto, Ariel Cáceres, ejecutivo del Sindicato de Trabajadores de la Caja de Seguridad Social (Casegural), sostuvo que las movilizaciones no cesarán hasta que el Gobierno se comprometa a no confiscar los recursos de los trabajadores y advirtió que no aceptarán que se les apliquen descuentos. «Tenemos el derecho a la protesta y hemos dicho que vamos a llegar a la huelga de hambre dura, si es necesario».
Según la Ministra de Salud, aplicar los descuentos o determinar el despido de algún trabajador en el marco de la norma es de cumplimiento obligatorio.
«Lo que está claro es que las autoridades de la Caja (gerencia general) están obligadas a aplicar la ley. No tienen que tomar ninguna decisión, sólo tienen que aplicar la ley, de lo contrario el Gerente tiene que asumir notas de cargo», manifestó la ministra Heredia.
La Razón intentó, ayer por la tarde, comunicarse con el gerente interino de la CNS, Saúl Peredo, pero se informó que éste se encontraba en una reunión en el Ministerio de Hacienda.
Los funcionarios de la CNS se declararon en huelga general indefinida el 4 de abril, en demanda de la anulación del artículo 23 de la Ley Financial que, según sus dirigentes, «confisca» los aportes de los trabajadores a la seguridad social a largo plazo. Exigen que el Gobierno se comprometa, de manera escrita, a no tocar esos recursos.
La protesta dejó sin atención médica a los cerca de 3 millones de afiliados a la CNS en todo el país. En ese contexto, la dirigencia de la entidad aseguradora se sumó a la protesta de la Central Obrera Boliviana (COB).
El Decreto Supremo 1592, de abril de 1949, es la norma que dispone aplicar los descuentos por los días no trabajados. Marco Dick, abogado especialista en temas laborales, explicó que el Decreto Ley 2665, de junio de 1951, es el que dispone el despido de trabajadores cuando se verifica el abandono individual de la fuente laboral por más de seis días hábiles y continuos.
La misma norma, agregó, se refiere al abandono masivo de fuentes laborales por más de más tres días continuos, no obstante explicó que ésta también fija que las sanciones se pueden aplicar sólo cuando las partes en conflicto hubieran agotado la conciliación y arbitraje ante el Ministerio de Trabajo.
En opinión del experto, en la mayoría de los casos es impensable aplicar esta disposición, porque podría generar un problema mayor.
Miguel Flores, ejecutivo de la Federación Nacional de Trabajadores de la Seguridad Social (Fensegural), aseguró que los 11 mil funcionarios de esta institución están «unidos y dispuestos a luchar por la institución, pero sobre todo a hacer que se respete la Constitución Política del Estado, que reconoce el derecho a la protesta».
Martín Maturano, viceministro de Salud, dijo que la huelga de la CNS «no tiene sentido» y más bien «debería llevar al análisis en profundidad de lo que está ocurriendo en la Caja».
Con hoy, son 9 días de paro
El paro indefinido de la CNS cumple hoy su noveno día consecutivo (empezó el lunes 4 de abril). El personal médico sólo atiende casos de emergencia en consultorios.
Una resolución daría paso a la libre afiliación
La ministra de Salud, Nila Heredia, anunció ayer que su despacho «está viendo la elaboración de una resolución ministerial que dé paso a la libre afiliación» de los empleados públicos a un seguro de salud que no sea el de la CNS.
Heredia advirtió la semana pasada que si los trabajadores de la Caja mantenían el paro en demanda de la abrogación del artículo 23 de la Ley Financial, el Estado, como empleador, podía tomar la decisión de desafiliar al personal de la administración pública de esta entidad.
A ello se sumó que el presidente Evo Morales informó el sábado que había propuesto a la COB «cerrar la Caja» para constituir un nuevo seguro. Al respecto, el ejecutivo de Fensegural, Miguel Flores, señaló que el Estado, antes de desafiliar a los asegurados, debe cumplir primero con el pago de sus deudas y luego seguir los pasos legales para la desafiliación.
Flores indicó que la mora del Estado con la entidad aseguradora es de aproximadamente 90 millones de dólares, unos 635 millones de bolivianos. «Es una deuda impagable», afirmó. Para el ejecutivo de Casegural, Ariel Cáceres, el anuncio de Heredia no es más que una señal de «desesperación» de parte de la autoridad; además dijo que ningún seguro quiere afiliar al Estado «porque es mal pagador».
La ministra considera que el anuncio de una desafiliación de los empleados públicos «generó una sensación de inseguridad, debido a que la Caja funciona con muchos problemas».
La atención en los centros de salud públicos fue irregular
Los profesionales médicos y administrativos de los centros de salud del sistema público acatan, a medias, el paro indefinido declarado por la Central Obrera Boliviana, por lo que el servicio es irregular.
«Los médicos vienen y atienden un rato a sus pacientes más urgentes y luego se van, pasa lo mismo con los administrativos», dijo un funcionario a contrato del Hospital de Clínicas que pidió el anonimato. Este medio constató la versión en una visita al lugar.
«No hay muchos médicos, pero los residentes (egresados y estudiantes de último año) son los que están haciendo su trabajo», señaló por su parte Virgilio Lora (48), un ciudadano que requería ser atendido por un especialista.
En tanto que en los hospitales dependientes de la CNS, el Obrero y Luis Uría de la Oliva, sólo se atienden los casos de emergencia. «No hay atención, únicamente casos de emergencia y aún así no quieren atendernos», sostuvo Graciela Ortubé (52), que intentó sacar un ficha en el Hospital Obrero.
Población asegurada crece
Datos del Sindicato de Trabajadores de la CNS dan cuenta de que la población asegurada crece exponencialmente en relación a la infraestructura. Así, en La Paz, la CNS posee dos hospitales de tercer nivel: Obrero y Materno Infantil, que cuentan con 703 camas cuando el promedio de internación es de 951. Las estadísticas muestran que el 2009, 62.441 pacientes llegaron a hospitalizarse.
No hay oposición al SUS
Los trabajadores de la Caja de Salud aseguran que no se oponen al Sistema Único de Salud (SUS), no obstante demandan que para su implementación el Estado corra con todo el financiamiento. En ese marco, la sugerencia de los empleados de la seguridad social es que, para lograr la universalización de la salud, el Estado debe, primero, eliminar el sistema privado de la atención médica.