La Minera Nueva Vista demandó ayer diálogo a los trabajadores que tomaron sus oficinas en La Paz y ratificó que invertirá $us 167 millones en sus concesiones mineras auríferas del distrito de Amayapampa, provincia Bustillos, departamento de Potosí.
Según la empresa, el año 2008 la compañía contrató a 280 trabajadores sin discriminación de edad y sexo. Durante aproximadamente 18 meses se impartieron una serie de cursos de entrenamiento, con el objetivo de avanzar a una especialización y preparar a los trabajadores para un proyecto de tecnología, reportó Erbol.
Sobre un salario acordado el 2008 y a pesar de no haber entrado en la etapa de producción, la empresa ha cumplido sistemáticamente los incrementos salariales anuales establecidos por el Gobierno.
La obtención del financiamiento de $us 167 millones, necesarios para iniciar el proyecto, ha sido postergada en varias ocasiones, principalmente por la falta de los permisos sociales, como ser el permiso de la utilización de las tierras y la Licencia Social. Estos permisos sociales no han sido otorgados debido a problemas internos entre comunarios y pobladores, señala.
El 16 de junio, el sindicato entregó un voto resolutivo exigiendo un incremento salarial adicional del 150% por encima del incremento dictado por el Gobierno, la salida de los administrativos del campamento, la llegada del presidente de la casa matriz y la «toma pacífica de la mina».
Esta resolución, de conocimiento de los ministerios de Trabajo, de Minería, de Gobierno y la FSTMB, fue emitida a pesar de haber sostenido una reunión en la que se acordaron varios puntos, pero cuya acta de entendimiento no quiso ser firmada por el secretario general del sindicato. A pesar de los esfuerzos, señala, «los trabajadores continúan con la toma de la mina y también tomaron la oficina central de la empresa, en la ciudad de La Paz, en claro desafío de la ley».