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El Gobierno demandará a JSB por daño económico

“Vamos a iniciar un proceso similar (a Jindal) por daño (económico) al Estado (…) Nosotros también vamos a hacer una acción legal para pedirles una compensación por el daño que nos han hecho, más de cinco años en Bolivia y no han invertido los $us 600 millones que (…) deberían”, sostuvo el ministro de Minería, Mario Virreira, en contacto con radio Panamericana.

El martes, Jindal Steel & Power Limited (JSPL) emitió un comunicado, desde su central en Nueva Delhi (India), en el que anunció que iniciará una demanda contra el Estado boliviano por daños y perjuicios causados por la rescisión del contrato para la explotación de hierro en el Mutún.

La posición se dio a conocer luego de que un día antes, el 16 de julio, la compañía india decidiera terminar el contrato de riesgo compartido suscrito con la estatal Empresa Siderúrgica del Mutún (ESM). La firma explicó que se vio obligada a terminar el contrato “debido al incumplimiento y falta de voluntad de parte del Gobierno de Bolivia para cumplir con sus obligaciones contractuales”.

El 8 de junio, Jindal había notificado a la ESM su intención de terminar el contrato, debido principalmente a la falta de un acuerdo que garantice el suministro de gas para el funcionamiento del complejo en la zona de explotación en el Mutún y a que no se entregó el total de las tierras saneadas.

Condiciones. El viernes, Jindal envió una carta a la ESM en la que puso cuatro condiciones “no negociables” para retomar las tratativas con el Gobierno y analizar su continuidad en el proyecto. La empresa pidió una garantía para no nacionalizar sus inversiones, que se levante el proceso contra sus ejecutivos, que se solucione la ejecución de la segunda boleta de garantía y que se deje sin efecto la auditoría.

Virreira reiteró que dichas condiciones fueron rechazadas. Es más, dijo que la empresa no avanzó en la puesta en marcha del proyecto que se adjudicó en 2007. “No ha invertido lo que debía invertir y ahora no quiere auditorías”. En ese marco, el ministro indicó que pese a la salida de la empresa india del país, se hará la auditoría a sus inversiones.

El 1 de abril se cumplió el plazo para que Jindal concrete la inversión de $us 600 millones comprometida para los dos primeros años del proyecto de industrialización del Mutún. JSB reafirmó en el comunicado emitido el martes que realizó la inversión comprometida de $us 600 millones, para lo cual “proveyó todos los documentos y contratos firmados con empresas internacionales”.

El 11 de abril, la Dirección de Asuntos Jurídicos del Ministerio de Minería indicó que la ESM contrató a la firma Delta Consult SMS Bolivia para hacer la auditoría a las inversiones de JSB. El 25 de mayo, la Fiscalía señaló que el informe de la auditoría indicaba que JSB invirtió $us 12 millones.

El 13 de julio, Amit Kumar, asistente ejecutivo del presidente de JSPL, Naveen Jindal, dijo que la empresa “nunca” se opuso a que se haga la auditoría, pero no estaba de acuerdo con que la auditoría la efectué la empresa Delta Consult. “Esta empresa certificó la ejecución de las primeras boletas que actualmente se encuentran en arbitraje. Por lo tanto, esta firma será llamada como testigo en el proceso arbitral y no es correcto que ésta se haga cargo de la auditoría”, aseguró.

JSB no tiene capacidad financiera

Inversión

El ministro de Minería, Mario Virreira, ratificó ayer que “Jindal (Steel Bolivia) nunca tuvo recursos para invertir en la magnitud que requiere el proyecto” de industrialización  del Mutún.

Alquiler

Virreira agregó además que la empresa india incluso tiene “deudas de alquileres de las oficinas que  estaban ocupando. Nunca nos demostraron una solvencia que se requería para este proyecto”.

Existen 15 empresas interesadas en el Mutún

Tras la salida del país de Jindal, el Gobierno informó ayer que hay 15 empresas internacionales interesadas en adjudicarse el proyecto para la explotación de hierro y manganeso en el cerro del Mutún. El ministro de Gobierno, Carlos Romero, señaló en Santa Cruz que la próxima semana se efectuarán una serie de reuniones con representantes de las empresas para darles a conocer los términos y expectativas del Estado.

El funcionario anticipó que las compañías interesadas proceden de Estados Unidos, China, Europa y Sudamérica. “Se viene trabajando en una nueva licitación porque tenemos un compromiso con el pueblo boliviano para que este emprendimiento se materialice”, dijo el Ministro de Gobierno.

El martes, el ministro de Minería, Mario Virreira, dijo que el proceso para contratar una nueva firma demorará al menos medio año. Romero precisó que se está trabajando en los términos de referencia para la contratación. “Las empresas han demostrado su interés en invertir en el Mutún en condiciones mucho más ventajosas de las que teníamos con Jindal”, dijo ayer Virreira.

El funcionario indicó que el Gobierno realizará inversiones en el 50% del yacimiento que está a cargo de la Empresa Siderúrgica del Mutún (ESM), con los recursos “provenientes de la misma ejecución de las (dos) boletas (de garantía)” a la siderúrgica india. Apuntó que esta labor tiene el fin de ocupar a los trabajadores que resulten afectados por la salida de Jindal. Detalló que hay un compromiso con el Comité Cívico de Puerto Suárez para que en 15 días la ESM presente un proyecto para consolidar este objetivo.

Jindal, un mal negocio para el país – Jorge Lema Patiño

Lo que empieza mal, termina peor. El contrato firmado por las partes mostró inexperiencia, no mala fe del Gobierno, pero sí de Jindal. Se quejaron del contenido elevado de fósforo en el mineral, que lo conocían con anticipación por los estudios previos realizados. Jindal conocía la situación y la capacidad real de provisión de gas.  La excesiva demanda de gas para la planta era para darle un valor agregado al producto hierro esponja (…) Jindal perdió la oportunidad y no podrá demostrar las inversiones comprometidas. El Gobierno con sólo consultar a las firmas que deberían implementar con sus tecnologías la construcción de las plantas  —de concentración, peletización y reducción directa—, podrá comprobar que no hubo contratos firmados, ni pagos adelantados a éstas, y por tanto el monto de $us 600 millones comprometido está en papel.

La planta Extec de extracción del mineral primario no vale más de $us 4 millones. Se desconocen trabajos de exploración geológica que no sobrepasarían otro monto similar. Lo que pretendía Jindal es mostrar en la bolsa que estaba realizando el proyecto.

Jorge Lema Patiño es experto en estrategias.