La Central Obrera Boliviana (COB) decidió anoche realizar un paro movilizado de 72 horas a partir del miércoles. El objetivo es lograr que el 100% de la mina Colquiri sea revertido a favor de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol). La dirigencia no descartó un paro general indefinido.
En caso de no tener una respuesta positiva, “una vez culminado el paro de 72 horas, la COB va a asumir una medida mucho más radical para conseguir el objetivo, no de un sector, sino de todo el pueblo boliviano, que es la reversión de la mina”, manifestó Juan Carlos Trujillo, ejecutivo de la COB, al finalizar el ampliado realizado en la ciudad de Cochabamba.
Severino Estallani, dirigente de los mineros asalariados de Colquiri, quien participó del encuentro de los obreros, demandó una inmediata solución al conflicto. En caso contrario, advirtió: “Nos atrincheraremos en diferentes puntos, no permitiremos el retorno de los cooperativistas, vamos a expulsar a los militares, policías y vamos a declarar un campo de batalla a Colquiri”. Después señaló: “Estamos cansados de la paralización de la mina”.
También criticó al presidente Evo Morales, que ayer descartó la nacionalización. “Es de lamentar, el Presidente hablaba cuando asumió la responsabilidad del país de que iba a gobernar escuchando al pueblo. Entonces es un mentiroso, que haga caso porque el enfrentamiento que pueda existir podría ser su destitución del Gobierno. En Colquiri no vamos a permitir el retorno de las cooperativas”, sentenció.
El ampliado se inició cerca de las 16.00 y culminó pasadas las 21.30. En las cinco horas de debate se definió que “no se negociará Colquiri” y que irán a dialogar sólo “para ratificar” su posición.