La ABC aclaró ayer que hasta el momento no se elaboró ningún diseño del tramo II de la carretera ecológica San Ignacio de Moxos-Villa Tunari en el Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS), debido a que no se recibió una orden.
El secretario general de la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC), Antonio Mullisaca, explicó que se no iniciaron los trabajos técnicos porque no se recibió una orden de parte del Ministerio de Obras Públicas y aclaró que el tramo II de la vía aún no cuenta con financiamiento. “Nosotros no somos la entidad competente porque para eso está el Ministerio de Obras Públicas, nosotros no tenemos ninguna orden todavía al respecto”, dijo.
Las declaraciones de Mullisaca fueron realizadas al ser consultado si la ABC realiza el trazo y gestiona el financiamiento para la construcción de este tramo. El 9 de diciembre, el ministro de Obras Públicas, Vladimir Sánchez, dijo que la carretera ecológica prevé dos alternativas: un viaducto que pase sobre los árboles o un túnel subterráneo. Hasta el 20 de diciembre se presentará el informe sobre la consulta y se enviará al Legislativo un proyecto para derogar la Ley 180 de intangibilidad y luego se empezará a estudiar el diseño de la carretera.
El ministro evitó dar una cifra que requerirá el proyecto y sólo señaló que tendrá “un alto costo”. El presidente de la Asociación de Ingenieros de Cochabamba, Gonzalo Maldonado, estimó que la obra comprenderá al menos 18 kilómetros y tendrá un costo de más de $us 300 millones.
En 2011, la empresa brasileña OAS se adjudicó todo el proyecto por $us 415 millones, de los que $us 332 millones iban a ser financiados por el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) de Brasil, siendo el resto contraparte boliviana. En abril de este año, el presidente Evo Morales decidió anular el contrato.