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El SIN investiga transacciones de SABSA; puede pedir auditoría

A dos días de finalizar la intervención en SABSA, el Servicio de Impuestos Nacionales (SIN) estudia la fecha para una auditoría en la empresa expropiada que puede revelar si Abertis y Aena compró acciones de la firma AGI en Bolivia, y si pagó tributos por esa transacción.

El lunes, el fiscal de la División Corrupción Pública, Aldo Ortiz, informó que el Ministerio Público investiga si para hacerse con la administración de los tres principales aeropuertos del país, el consorcio español Abertis y Aena compró acciones de la compañía americana Airport Group International (AGI) en Bolivia o si las adquirió en el extranjero.

En ese marco, Ortiz explicó que en caso de que la compra del paquete accionario a AGI se hubiera efectuado en Bolivia, la española Abertis tendría que haber tributado en el país. Para averiguarlo, solicitó información al Servicio de Impuestos Nacionales (SIN) sobre dichos pagos.

Al respecto, el presidente del SIN, Roberto Ugarte, indicó ayer que la entidad efectúa un “proceso de investigación” de la filial nacionalizada SABSA y que en los próximos días se determinará la posibilidad de “programar una auditoría a esa empresa a fin de establecer si ha pagado correctamente o no sus impuestos”.

La Razón intentó comunicarse el lunes y ayer con el exgerente de SABSA Anthony Alicastro para conocer si la firma que dirige compró las acciones de la empresa americana AGI en el país o en el exterior, pero el ejecutivo tenía su celular apagado.

El funcionario afirmó que el consorcio español Abertis y Aena cumplió de forma adecuada con el pago de sus impuestos, pero que el SIN pretende “analizar si ha habido algún incumplimiento a la norma”.

El 18 de febrero, el presidente Evo Morales nacionalizó, vía decreto, las acciones de Abertis y la Agencia Española de Navegación Aérea (Aena) en su filial Servicios de Aeropuertos Bolivianos SA (SABSA) porque incumplió su plan de inversiones.

Consultado sobre si existe algún indicio para iniciar una auditoría a la empresa, Ugarte señaló que una vez que el paquete accionario de la firma española pasó a manos del Estado boliviano, la entidad estatal debe verificar si la compañía cumplió con todas sus obligaciones impositivas.

El 19 de febrero, el ministro de Obras Públicas, Vladimir Sánchez, reveló que se está revisando si el monto de inversión que hizo la española “era real”, porque “hay indicios” de que manejaba una doble contabilidad.

Sobre el tema, Ugarte indicó que esa situación también se verificará “cuando nosotros intervengamos”.

Sánchez añadió que la ATT demostró que con las tarifas establecidas, por los servicios que prestaba SABSA, ésta “obtenía utilidades extraordinarias y tenía recursos suficientes” para realizar inversiones.

Tres días después, el ministro anunció que desde el 1 de marzo, fecha en la que concluirá la intervención a SABSA, el Ministerio de Obras Públicas se hará cargo de la administración de los tres aeropuertos del eje troncal del país. Detalló que ese día se hará una reunión de accionistas en Santa Cruz, donde se tomará el control de las acciones estatizadas y se definirán las decisiones “necesarias”.

Inversión y el pago de impuestos

La filial española SABSA indicó que, entre marzo de 1997 y diciembre de 2012, invirtió $us 33,6 millones. También pagó el capital e intereses del crédito italiano que contrajo el país para la construcción del aeropuerto Jorge Wilstermann. El monto a enero de 2013 llegó a $us 15,65 millones.

Datos de la empresa española muestran que, entre marzo de 1997 y diciembre de 2012, SABSA canceló la suma de $us 42,13 millones por concepto de impuestos