Argentina ofrece otro canje a ‘fondos buitre’
Juicio. Una corte de EEUU escuchó alegatos
Argentina reiteró ayer que no pagará el total de la deuda en manos de los “fondos buitres”, aunque abrió la puerta a ofrecerles un nuevo canje para cerrar la larga batalla judicial que afronta en Nueva York desde su suspensión de pagos en 2001.
“Estoy intentando persuadir a la corte para que acepte algo que es razonable y que no crea una confrontación terrible”, afirmó el abogado que representa al país, Jonathan Blackman, durante una audiencia clave para el proceso en el Tribunal de Apelaciones del Segundo Circuito federal de EEUU.
Con la presencia en la sala de la corte del vicepresidente argentino, Amado Boudou, y del ministro de Economía del país, Hernán Lorenzino, el letrado insistió en que Argentina no piensa pagar el 100% de la deuda en manos de los bonistas que rechazaron las reestructuraciones de 2005 y 2010.
“No obedeceríamos voluntariamente una orden de ese tipo”, dijo Blackman, consultado sobre qué haría Argentina en caso de que el Tribunal de Apelaciones ratifique el fallo del juez federal Thomas Griesa, que obliga al país a pagar los 1.330 millones de dólares que reclaman los demandantes.
Éstos están liderados por el fondo NML (de Elliot Management, del millonario Paul Singer), que logró el embargo temporal de la fragata Libertad de la Armada argentina en Ghana, aunque entre los querellantes también hay pensionistas de varias nacionalidades, incluida Argentina.
El abogado de Argentina ofreció que estos acreedores sean pagados en las mismas proporciones que quienes sí aceptaron los canjes de deuda anteriores, más de un 90% del total y que accedieron a unas quitas superiores al 70% sobre los montos originales.
Pero el abogado de NML, Theodore Olson, recordó ante ese tribunal que la presidenta argentina, Cristina Fernández, afirmó en noviembre pasado que su país no pagaría “ni un dólar” a los llamados “fondos buitres”, por lo que puso en duda la veracidad de la oferta de un nuevo canje.
La Apelación al supremo de EEUU
La decisión del Tribunal de Apelaciones demorará semanas o tal vez meses y, de no ser favorable para Argentina, el país podría intentar recurrir al Tribunal Supremo de EEUU, aunque diferentes analistas han asegurado que es muy poco probable que el caso llegue hasta la máxima corte de este país.