El presidente Evo Morales inauguró hoy la segunda Unidad Termoeléctrica de El Alto, que adicionará 34 megavatios (MW) al Sistema Interconectado Nacional (SIN), y aseguró que con la nueva planta no es justificable ningún corte de energía eléctrica.
La instalación y montaje de la segunda Unidad Termoeléctrica en El Alto forma parte del contrato suscrito entre la Empresa Nacional de Electricidad (Ende) y el consorcio Preca-Pacific Rim Energy, para la ingeniería, diseño, suministro, instalación, montaje y puesta en marcha de esa unidad generadora.
El proyecto demandó una inversión de al menos 46 millones de dólares, financiados en su integridad por un crédito interno del Banco Central de Bolivia (BCB). En 2012, la empresa Valle Hermoso puso a operar el primer turbogenerador de esa región que incrementó en 17,50 megavatios de potencia la oferta eléctrica nacional.
Morales demandó a los gerentes, profesionales, técnicos y trabajadores de Ende actuar y trabajar con responsabilidad y señaló que “no puede haber ningún corte de energía” después de la inauguración de la planta.
“Hay que mejorar la parte técnica y tecnológica”, abogó el Presidente tras recordar que en el Chapare, Cochabamba, constantemente existían cortes del suministro de energía eléctrica tras una lluvia.
Afirmó que las empresas del Estado necesitan de inversión, pero también, señaló, deben generar divisas. “Si no hacemos eso (administrar bien nuestras empresas) otra vez los neoliberales pueden justificar (su retorno), diciendo que las empresas del Estado no sirven, que los bolivianos no sabemos administrar nuestras empresas”.
Morales afirmó que existen avances importantes en distintos proyectos de desarrollo energético, orientados a generar la energía suficiente para convertir a Bolivia en país exportador de electricidad antes del 2025, como señala una de las metas del Plan Patriótico del Bicentenario anunciado en la ciudad de Oruro el 6 de agosto de 2012.
“Nuestras empresas no pueden fracasar”, sostuvo el Mandatario en su primera jornada de actividades públicas luego de su retorno de las islas Fiji, donde participó de la reunión del Grupo -77 (G-77).
El Gobierno inauguró en 2010 la unidad termoeléctrica en Carrasco, Cochabamba; entregó motores para la generación de energía para la Central Termoeléctrica de San Matías, en Santa Cruz; y en 2012 inaugurar las termoeléctricas a diesel en Trinidad (Beni), con una capacidad de 45 MW, según datos del Ministerio de Hidrocarburos y Energía.