Por lo menos 100 palestinos murieron en Gaza solo ayer, el día más sangriento desde el inicio de la ofensiva israelí, el 8 de julio, que ya se ha cobrado la vida de 438 palestinos, la mayoría de ellos civiles.
“Por lo menos 100 personas fallecieron hoy (por ayer)”, la mayoría en una ofensiva israelí contra el suburbio de Shalaya (este de Gaza), indicó Achraf al-Qudra, portavoz de los servicios de emergencia en Gaza.
Israel anunció que 13 de sus soldados, de la brigada Golani, perecieron en las últimas 24 horas en combates en Gaza, subiendo el balance de militares israelíes muertos a 18.
“Desde ayer por la noche, 13 combatientes de la brigada Golani perdieron la vida en combates contra los terroristas de Hamas”, señaló el Ejército en su cuenta Twitter, en un balance confirmado por una portavoz.
Catástrofe. El Ejército israelí lanzó uno de los bombardeos más mortíferos desde el principio del conflicto contra el barrio de Shajaya, que quedó reducido a escombros entre los que yacían decenas de cadáveres.
Además 250 palestinos resultaron heridos en el mismo barrio, según el responsable de salud de Hamas, Yusef Abu Resh, en una conferencia de prensa en el hospital Shifa de Gaza.
Dijo que si no se evacuaba inmediatamente a los muertos y a los heridos, sería una “catástrofe humanitaria”. También ocho personas murieron en un bombardeo contra un edificio de habitación en un céntrico barrio de la ciudad de Gaza, indicó un portavoz de los servicios de emergencia.
La violencia se intensificó ayer, pese a que el movimiento islamista Hamas e Israel anunciaron haber aceptado una petición del Comité internacional de la Cruz Roja para realizar una tregua humanitaria.
“Una vez más, Hamas rompe el alto el fuego. Este había sido negociado por el CICR (Comité Internacional de la Cruz Roja) para una pausa humanitaria. La Tsahal (el Ejército) replica en consecuencia”, indicó el portavoz del Ejército israelí, Peter Nerner, en Twitter.
El objetivo de la tregua era la evacuación de los muertos y heridos de los últimos ataques israelíes.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, que llegó ayer a Doha, llamó a Israel a “hacer mucho más” para proteger a los civiles en Gaza.
Israel movilizó a 53.200 hombres — de los 65.000 reservistas autorizados por el Gobierno —para atacar la Franja, un pequeño territorio de 362 kilómetros cuadrados donde viven hacinados 1,8 millones de palestinos.
La destrucción de los túneles, infraestructuras subterráneas, es una de las prioridades de Israel para evitar ataques contra su territorio.
“Hay una amenaza permanente de ver (a combatientes palestinos) salir de un túnel cerca de una localidad israelí y cometer una masacre”, subrayó el portavoz militar Arye Shalicar.
El brazo armado de Hamas, las Brigadas Ezzedine al Qasam, reivindicó operaciones “tras las líneas enemigas”.
La noche del domingo, Hamas reconoció el secuestro de un soldado israelí, lo que provocó manifestaciones de júbilo en las calles de la ciudad de Gaza.
“El soldado israelí Shaul Aaron se encuentra en manos de las Brigadas Ezzedine al-Qassam”, brazo militar del movimiento islamista, declaró su portavoz Abu Obeida en una declaración por una red de televisión.
Consejo de Seguridad se reúne de emergencia
El Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) se reunió de urgencia ayer en Nueva York, a las 21.30 locales, para debatir sobre la situación en la Franja de Gaza, anunciaron fuentes diplomáticas.
La reunión fue convocada a pedido de Jordania, miembro no permanente del Consejo, tras un llamado en ese sentido del presidente palestino, Mahmud Abas.
La autoridad palestina también se reunió con los líderes de Hamas para hablar de una tregua.
En un discurso televisado, Abas había calificado la situación en la Franja de Gaza de “insoportable”, en referencia al bombardeo por Israel de un suburbio del este de la ciudad de Gaza, el más letal desde el inicio de las operaciones israelíes el 8 de julio.
Los 15 países miembro del Consejo de Seguridad habían mantenido el viernes por la tarde una reunión sobre Gaza sin llegar a ponerse de acuerdo sobre una declaración común.
Desde el inicio del conflicto, el Consejo había tenido una primera reunión infructuosa el 10 de julio antes de llamar un cese el fuego dos días después en una declaración aprobada por unanimidad.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, inició ayer en Doha una gira por Medio Oriente.
Llorenti responsabiliza a EEUU
El embajador de Bolivia ante la Organización de Naciones Unidas (ONU), Sacha Llorenti, afirmó que Estados Unidos tiene responsabilidad en “primer grado” en la “trágica” situación que atraviesa Palestina, cuyo pueblo es víctima de la ocupación y ataque de Israel.
“El país que bloquea la decisión a favor del pueblo palestino sin lugar a dudas es Estados Unidos, aquí en la trágica situación que vive Palestina la responsabilidad de Estados Unidos es en primer grado”, dijo.
En contacto telefónico con el programa El pueblo es noticia, Llorenti expresó: “Estamos preocupados y frustrados por la situación que se vive en la Franja de Gaza, en territorios ocupados por Israel”.
Explicó que en las Naciones Unidas el Consejo de Seguridad tiene a cinco países como miembros permanentes con derecho a veto. Basta que uno de ellos rechace alguna decisión esa queda sin efecto, incluso sin la necesidad de argumentar la postura asumida.
En el caso de Palestina, indicó que recurrentemente se da esa figura por lo que, pese a los pronunciamientos y alternativas planteadas, es imposible llegar a una solución definitiva, que pasa —en criterio de Llorenti— por la declaración de Palestina como Estado pleno.
Llorenti agregó que Bolivia participa en el tratamiento del conflicto palestino, en el marco de los países no alineados, y que se pronunció contra el ataque a la Franja.