Las principales oficinas de la Empresa de Correos de Bolivia (Ecobol) amanecieron este jueves con resguardo policial y con comunicados sobre su cierre. El ministro de Obras Públicas, Milton Claros, justificó la decisión con el argumento de que la firma ya operaba con “números rojos” y garantizó que los más de 300 trabajadores despedidos recibirán su liquidación respectiva.

Un nuevo operador postal entrará en funcionamiento, aunque aún no se conoce cuándo y bajo qué características. Tampoco se garantizó la recontratación de los hoy despedidos porque el nuevo personal que será contratado, adelantó Claros en una breve contacto con la prensa, será en función a una convocatoria pública.

Un decreto supremo aprobado en la reunión de gabinete del miércoles dio paso al cierre de la empresa de correos que enfrentaba problemas de liquidez. Las oficinas en distintas ciudades amanecieron con fuerte resguardo policial y comunicados pegados en puertas principales que daban cuenta del cierre y del inicio de trámites de liquidación salarial.

“El tema de Ecobol es una situación bastante complicada desde hace mucho tiempo, porque  lamentablemente no es autosostenible, es una empresa que ha estado trabajando con números  rojos, y hemos tomado la decisión de cerrar operaciones de Ecobol y habilitar un nuevo operador postal que garantice el servicio”, explicó el ministro.

La firma estatal fue creada mediante decreto 22616 de 1990 y reemplazó a la Dirección General de los Correos. De acuerdo con la norma la firma se crea como empresa pública de administración descentralizada del Estado con personalidad jurídica propia, además se establece que su funcionamiento es con recursos propios.

En las oficinas de la Unidad de Liquidación de Ecobol, ya algunos trabajadores hacían fila para tramitar su liquidación. Varios de ellos estaban más de 20 años y señalaron que este cierre no fue comunicado oportunamente, sin embargo admitieron que se veía venir por los constantes problemas económicos por los que atravesaban.

“Nosotros vinimos a trabajar esta mañana y nos vimos muy sorprendidos al ver todo precintado y con policías, mucha gente ha entrado en pánico y se ha puesto a llorar porque esta es su fuente de trabajo”, contó una de las trabajadoras, quien además sostuvo que se les adeuda el bono de refrigerio desde 2017.

Claros recordó que se hizo esfuerzos sin resultados para poner a flote a la empresa y anunció que en su lugar será creada otra para atender el servicio postal en Bolivia, aunque descartó una recontratación de los trabajadores hoy cesados.

“Las contrataciones nuevas van a salir con convocatoria pública y las personas que cumplan con las exigencias va a ser contratadas de acuerdo a cumplimiento de requisitos”, insistió en medio de una vigilia que hacían algunos trabajadores en las oficinas centrales de Ecobol, en el centro de la ciudad de La Paz.