En Santa Cruz fue promulgada este lunes la ley que activa el financiamiento chino de $us 396.134.000 y la puesta en marcha de la construcción de la planta Siderúrgica del Mutún, que estará a cargo de la también firma china Sinosteel Equipment y Engineering Co. La obra deberá ser entregada en 30 meses en pleno funcionamiento y producción de acero, de acuerdo al contrato.
El presidente Evo Morales firmó en un acto en la ciudad de Santa Cruz la ley sancionada en la Asamblea Legislativa Plurinacional que aprobó el Convenio de Crédito Preferencial al Comprador PBC No. 2017, suscrito por el Banco de Exportaciones e Importaciones de China (Eximbank) y el Estado por un monto de hasta $us 396.134.000.
La siderúrgica del Mutún es un proyecto ubicado en la fronteriza Puerto Suárez, en el departamento de Santa Cruz. Es retomado después del fracaso de la india Jindal & Power que en 2007 se adjudicó la construcción del megaproyecto sin lograr avances, por lo que el Estado rescindió el contrato.
Ahora la firma china, con la que se firmó un contrato en diciembre pasado, tendrá la tarea de levantar la obra para aprovechar el recurso natural. El ministro de Minería, César Navarro, informó que en el contrato está establecido que la planta deberá ser entregada operando y produciendo un acero de alta calidad para competir con Brasil, Argentina y Perú.
Durante un año, después de su inauguración, la firma constructora estará supervisando su normal funcionamiento para luego entregar su manejo a recursos humanos bolivianos que capacitará en fábricas de acero de China en los próximos 30 meses. La contraparte boliviana es de $us 15 millones.
Morales destacó la importancia del emprendimiento para el desarrollo de Bolivia y cuestionó a quienes observan el nivel de endeudamiento con créditos como los provenientes de China.
“Vamos bien económicamente y por eso es posible garantizar estas grandes inversiones para la industrialización”, afirmó y expresó que los trabajadores que vayan a ser contratados y formen su sindicado eviten la paralización de la actividades por el efecto negativo en el cumplimiento de los plazos y puesta en funcionamiento.
“Decir a la Central Obrera Boliviana (COB) va a haber otro sindicato, el sindicato que no sea para hacer huelga, por favor. En algunos sectores las huelgas nos perjudican, ni se imaginan. Algunos tienen derecho, es su derecho respetado, pero ustedes saben algunos sectores se movilizan y después dejan mucho que desear. Es importante la reflexión”, sostuvo.
La planta tendrá una capacidad de producción de 194 mil toneladas año para cubrir la demanda internas y exportar excedentes. Además creará 1.500 empleos directos y más de 3.000 indirectos.
Diferentes autoridades nacionales, departamentales y regionales participaron del acto. La diputada oficialista y cruceña Adriana Salvatierra destacó la puesta en marcha del proyecto. «Esperamos más de 50 años que se materialice este sueño», sostuvo. (02/04/2018)