El Gobierno decidió suspender una inversión programada de al menos $us 900 millones en tareas de exploración y explotación en los campos San Telmo y Astillero, en el departamento de Tarija, y trasladar esa inversión a otros departamentos. La justificación es la tergiversación en que se habría incurrido sobre la afectación en la reserva de Tariquía.
El ministro de Hidrocarburos, Luis Alberto Sánchez, dio a conocer la decisión en una conferencia de prensa en la capital tarijeña y la atribuyó a la “mezquindad” de las autoridades departamentales que, según dijo, implicará que la región deje de percibir hasta $us 2.000 millones y afectará en el incremento de las reservas hidrocarburíferas.
“Políticos mezquinos, Gobernación, alcaldía, asambleístas departamentales, nacionales y Comité Cívico, no han permitido (el proyecto). Han tergiversado toda la información referente a Tariquía, el tema socio-ambiental ha afectado a las empresas y, bueno, hemos considerado y vamos a suspender las inversiones en Tariquía”, anunció.
La estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) suscribió contratos con las empresas YPFB Chaco Sociedad Anónima y Petrobras Bolivia Sociedad Anónima para la exploración y explotación de las áreas hidrocarburíferas Astillero y San Telmo, ubicadas en el departamento de Tarija. Ahora esos acuerdos quedarán anulados.
De acuerdo al Gobierno, la exploración de hidrocarburos preveía una afectación de solo el 0,014% sobre el parque de Tariquía.
La afectación para el departamento por la decisión es de “cerca de $us 900 millones en inversiones en dos campos, un incremento de producción de 10 millones de metros cúbicos (de gas) y la afectación a Tarija es de cerca de $us 1.800 millones, $us 2.000 millones”.
Sánchez anunció que la inversión suspendida en ese departamento será llevado a otro y consideró que ahora las autoridades de Tarija deberán dar cuenta de las consecuencias de sus acciones pues “planifican restando inversiones”. (04/05/2018)