Gobierno dice que la nacionalización del jet N557 es irreversible
El ministro de Obras Públicas recordó que la Aduana Nacional aplicó procediciemtos y normativas vigentes para declarar que ahora esa aeronave es propiedad del Estado.
El Gobierno advirtió este miércoles que es “irreversible” el decomiso y posterior nacionalización del jet Super Mid-Size Gulfstream III, con matrícula N557 JK. Lo hizo un día después que Omar Durán, el abogado del propietario, anunciara el inicio de acciones legales contra las autoridades de Bolivia por este hecho.
“De acuerdo con la ley aduanera, ya es irreversible”, afirmó el ministro de Obras Públicas, Milton Claros, cuando fue consultado sobre las acciones anunciadas por Durán.
Recordó que la Aduana Nacional de Bolivia (ANB), en aplicación de su normativa, estableció que la aeronave, que arribó al aeropuerto El Trompillo el 7 de abril de 2017, cometió delitos vinculados al contrabando, por lo que se aplicó el proceso para su nacionalización.
“Las acciones las asumió la Aduana y entonces es un bien que ya no le pertenece al dueño por todo el proceso que se ha seguido”, afirmó Claros, quien, no obstante, dijo que el propietario puede iniciar las acciones que considere convenientes si cree que se vulneraron sus derechos.
“Que inicie las acciones que tenga que iniciar, no hay ningún problema. Que demuestre que no ha infringido va a ser importante. La pregunta será por qué ha tardado tanto en presentarse”, afirmó.
La nave permaneció en el aeropuerto El Trompillo hasta que a fines de abril y principios de mayo de este año, cuando la Aduana, anoticiada de su permanencia sin el debido trámite de admisión temporal, procedió a su decomiso y posterior adjudicación, para pasarla luego a disposición Ministerio de la Presidencia.
Este despacho alegó que no contaba con recursos para su mantenimiento, por lo que el jet quedó a disposición de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC).
Este martes Durán apareció en un medio de comunicación para anunciar el inicio de acciones legales contra las autoridades bolivianas que nacionalizaron la aeronave y argumentó que no fue abandonada y que se pagó por su permanencia a la Administración de Aeropuertos y Servicios Auxiliares a la Navegación Aérea (AASANA).
“El propietario es una persona que justamente está viendo y sacando la tramitación pertinente ante instancias internacionales para que podamos iniciar las acciones legales correspondientes”, anunció en declaraciones a la red ATB. (01/08/2018)