Arica no cede en el alza tarifaria, hay 1.400 coches parados
La ASP-B plantea un aumento del 10% para la carga boliviana; EPA lo rechaza. Empresarios bolivianos ya plantearon al Gobierno la conformación de una institución público-privada que se haga cargo del manejo de la carga por ese atracadero chileno, incluso de las negociaciones en el tema tarifario.
La EPA desahució la oferta boliviana de un alza tarifaria del 10% para la carga en el puerto de Arica, prolongando el perjuicio al comercio exterior del país. Unos 1.400 camiones están parados en ese atracadero y los transportistas advierten con protestas.
La Administración de Servicios Portuarios-Bolivia (ASP-B) remitió ayer una nota a la Empresa Portuaria Arica (EPA), en la que plantea un incremento del 10% autorizado por el Directorio, remarcando que ello implica un “esfuerzo financiero significativo”.
Con ello se busca que el concesionario privado Terminal Puerto Arica (TPA) agilice el despacho de la carga y ya no se perjudique al comercio exterior del país, sobre todo al transporte pesado, cuya dirigencia advirtió ayer con el inicio de medidas de protesta.
El gerente ejecutivo de la ASP-B, David Sánchez, indicó que la resolución obedece a un análisis financiero, en el marco de los acuerdos de las últimas actas de entendimiento con la EPA. Además, manifestó que no quiere pensar que exista una estrategia para sacar a su entidad de Arica, para que el trato sea entre privados.
Empresarios bolivianos ya plantearon al Gobierno la conformación de una institución público-privada que se haga cargo del manejo de la carga por ese atracadero chileno, incluso de las negociaciones en el tema tarifario. Se tiene previsto una reunión con la Cancillería para este lunes.
Tras enviar la carta a la EPA, Sánchez expresó que se aguarda la respuesta para trasladarse inmediatamente hasta Arica, en compañía del Directorio y una delegación del Ministerio de Relaciones Exteriores, con el objetivo de suscribir un documento que ponga fin al conflicto que se arrastra desde agosto.
Pero, a través de su Unidad de Comunicación, la EPA anunció a La Razón que rechaza el plan, ya que ese “10% (de aumento) es con respecto al Acta III que venció en diciembre de 2013”, por lo cual se aplicó el Manual de Servicios que conlleva el nuevo incremento. “EPA opera en Chile con normativas vigentes, no con instrumentos que caducaron hace seis años”.
Eso no es todo. Ratificó su propuesta del lunes 23, relativa a un descuento del 38%, dejando en claro que se levanta el ultimátum para su aceptación y que está abierta a un nuevo encuentro con la ASP-B en Arica, para suscribir un acuerdo y así evitar mayores perjuicios, principalmente a los transportistas. Remarcó que la rebaja será retroactiva al 5 de agosto, cuando entró en vigencia el Manual en cuestión.
Mediante una nota de prensa, el gerente general de la EPA, Rodrigo Pinto, expresó su preocupación “por el estado de más de 1.400 camioneros (bolivianos) que están en la ciudad (de Arica), a la espera de que la ASP-B pague la deuda y así se pueda reiniciar el despacho de las cargas”. Incluso ello llevó al colapso de los garajes habilitados en esa urbe chilena.
Sánchez aclaró que la propuesta de TPA, sobre el “descuento del 38%”, esconde un incremento de 102% sobre las tarifas vigentes, lo que no fue acordado y pondría en riesgo “no solamente la situación y la vida financiera administrativa de la ASP-B, sino que “atentaría contra el comercio exterior boliviano”.
El vicecanciller Benjamín Blanco informó que en los últimos meses intercambió notas con Chile para abordar el tema tarifario y que sean la ASP-B y la EPA las que definan un alza. Incluso, para una solución se planteó la mediación de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
“Para poder definir un sistema que permita un reajuste automático de las tarifas y para esto sugeríamos poder trabajar con la asistencia técnica de la CEPAL”, dijo. Y Sánchez dejó en claro que la ASP-B es el único agente aduanero acreditado por Bolivia en Arica, según el Tratado de 1904.