El toque de queda determinado por el Gobierno de Chile, a raíz de los conflictos sociales, origina un perjuicio al transporte de carga internacional boliviano en el puerto de Arica. La afectación se da en el turno de la noche porque no se puede mover la carga.
“A raíz de los problemas sociales que existe en Chile, el Gobierno ha dictado un toque de queda; este toque de queda está impidiendo la atención de la carga (boliviana) en los horarios nocturnos, se está atendido solamente en horarios diurnos y la parte de la noche se está dejando de atender”, dijo ayer el representante del transporte de carga nacional e internacional de El Alto, Gustavo Rivadeneira.
Indicó que en el puerto de Arica hay una dinámica de movimiento de al menos 600 camiones bolivianos por día que entran y salen para cargar y descargar la mercadería.
El conflicto en el país vecino se originó hace una semana a consecuencia de la elevación del pasaje del metro. La población rechazó la medida y el Gobierno declaró toque de queda para evitar que se acrecienten las protestas.
El dirigente del transporte dijo que esa medida política ocasionó un retraso en el recojo de la mercancía. “Si tienes que cumplir en una determinada hora (el recojo de la carga) lo estas posponiendo para el día siguiente”. Consideró que las protestas en Chile podrían agravarse y generarían una incertidumbre para su sector porque se paralizaría totalmente las atenciones en ese embarcadero.
La Administración de Servicios Portuarios-Bolivia (ASP-B) ya desde el martes alertó que las operaciones al interior del puerto fueron paralizadas con el objetivo de precautelar la seguridad de la mercancía y la logística del comercio exterior boliviano, además de la integridad de los transportistas de carga internacional.
El miércoles se informó, desde la ASP-B, que las faenas en el puerto de Arica se realizan con “relativa normalidad” hasta las 21.00, debido a que el decreto de emergencia instruido por el Gobierno chileno autoriza el toque de queda con efecto a partir de las 22.00.
Ante ello, la entidad portuaria boliviana recomendó a los operadores del comercio exterior del país tomar las precauciones para evitar perjuicios o daños “siendo que esta problemática se suscita por motivos de fuerza mayor” y ajenos a las facultades bolivianas.
No obstante, desde la Empresa Portuaria Arica (EPA) se informó el miércoles que las operaciones en ese atracadero se realizan con normalidad en sus tres turnos, razón por la cual no hubo afectación a la programación de los turnos para la atención de naves y despacho de mercancías.
Normalidad. “No es efectivo que el puerto de Arica esté paralizado por la coyuntura nacional y que haya suspendido sus servicios. Desde el viernes 18 de octubre hasta hoy (por el miércoles) hemos tenido la recalada de siete naves en el puerto y la operación diaria para la carga y descarga de mercancías y desconsolidado para los servicios de cargas de Chile, Perú y Bolivia que se atienden en nuestro puerto”, afirmó el gerente de EPA, Rodrigo Pinto, a través de un comunicado.
Explicó que en el primer turno del miércoles, “a primera hora zarpó la nave que estuvo los últimos dos días cargando minerales bolivianos de exportación. En paralelo, han estado ingresando camiones bolivianos con carga de exportación, mayoritariamente soya. Y para el segundo turno se han programado despachos de carga desconsolidada”, expuso.
Para evitar que el toque de queda afecte al servicio del puerto de Arica, la estatal EPA gestionó los permisos de desplazamiento de personal para continuar con las operaciones con normalidad.
(25/10/2019)