Bolivia compra vacunas de 12 países por $us 11,5 millones
A noviembre del año pasado, Bolivia adquirió de India un total de 52 toneladas de estos productos médicos por un valor de $us 4,98 millones.
Bolivia adquirió entre enero y noviembre del año pasado 92 toneladas de vacunas para la salud humana, que se usan tanto en el sistema público como privado, de 12 países por un valor de $us 11,5 millones, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
A noviembre del año pasado, Bolivia adquirió de India un total de 52 toneladas de estos productos médicos por un valor de $us 4,98 millones. No es casual que este país sea el principal proveedor de vacunas humanas para Bolivia, con un 43% del total, y para muchos otros países del globo ya que es considerado la farmacia para naciones en vías de desarrollo.
Este denominativo surge porque el Estado indio está facultado para dar una licencia especial con la que permite la fabricación de genéricos (medicamentos identificados por su principio activo). Así, sus farmacéuticas pueden copiar productos patentados pagando un pequeño derecho al laboratorio dueño de la patente e introducirlos al mercado de la salud a bajos precios.
El 57% restante de los países de donde se internan medicamentos para Bolivia son Bélgica, Australia, Argentina, Corea, Cuba y Estados Unidos, entre otros. (Ver infografía para más detalles).
¿Por qué son tan importantes las dosis de inmunización para la población y el motivo por el que los gobiernos las adquieren? El pediatra boliviano Vladimir Aguilera explica que “con ellas se previenen enfermedades que pueden provocar muchas complicaciones y en el área pediátrica evitar el riesgo de la mortalidad infantil”.
El programa ampliado de inmunización en Bolivia brinda de forma gratuita vacunas contra enfermedades como la tuberculosis, difteria,tétanos, tos ferina (coqueluche), hepatitis B, poliomielitis, neumonías, meningitis, diarreas severas por rotavirus, influenza, sarampión, rubéola, parotiditis, fiebre amarilla y cáncer cérvico uterino. Estas se aplican de forma dosificada desde el nacimiento y durante la infancia.
“Para la población adulta hay vacunas bajo ciertas características como para pacientes con las defensas bajas, pacientes oncológicos que reciben quimioterapia; en pacientes con enfermedades que condicionan la baja de defensas puede considerarse la aplicación de vacunas. Además personal de salud que está expuesta a enfermedades”, añade el profesional.
Sin embargo, no todas las vacunas están cubiertas por el sistema de salud. “Las que no cubre nuestro programa ampliado es la vacuna contra la hepatitis A y contra meningococo por el costo. Lo mismo sucede con la vacuna de la varicela que no se ha implementado en el programa y no llega al país ni para aplicarla en el sistema privado; no hay ningún laboratorio que la importe. Solo han habido esfuerzos aislados de traerla”, señala Aguilera.
Lo que sí hay que dejar en claro es que una misma vacuna puede tener diferentes precios. ¿A qué se debe? El médico explica que está relacionada con los efectos secundarios, como la fiebre y molestias, ya que algunos laboratorios diseñan la vacuna para aminorarlos. Una de las más demandadas de este tipo es la hexavalente, con la marca comercial Hexaxim, la cual protege contra la difteria, el tétano, la tos ferina (acelular, multicompuesta), la hepatitis B (ADN recombinante), la poliomielitis (inactivada), y Haemphilus influenza tipo B (conjugada).
Esta se coloca a los dos, cuatro y seis meses de edad; es decir, en tres dosis y en una consulta privada cada administración oscila entre los Bs 500 o más.En cuanto a los precios promedios por unidad que pagan los gobiernos por cada vacuna, en el portal paho.org se puede encontrar la información basada en datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
Pero como ocurre con los medicamentos, los nuevos productos y sus patentes disparan los precios, más aún cuando hay monopolios. Según la información publicada en la web medicamentalia.org, ante las nuevas vacunas, como contra el neumococo, el rotavirus y el Virus del Papiloma Humano (VPH), el coste de inmunizar se ha multiplicado en un 68% entre 2001 y 2018.