La crisis económica causada por la pandemia del COVID-19 o nuevo coronavirus ha provocado estragos en la mayoría de los países del orbe. Brasil y Argentina, principales y únicos mercados para el gas natural boliviano, han bajado al mínimo su demanda del combustible, sobre todo las empresas del sector industrial.
En Bolivia ocurre lo mismo, con su sector productivo prácticamente paralizado debido a las medidas de confinamiento dictadas por el Gobierno para hacer frente a esta enfermedad. Así, la producción de gas natural en abril cayó a su nivel más en 18 años debido a una menor demanda del combustible, tanto en el mercado interno como en los mercados de Brasil y Argentina, países que inclusive nominaron por debajo de lo acordado contractualmente.
El gigante sudamericano requirió una media de 10,6 millones de metros cúbicos por día (MMm3d) frente a los 10,5 MMm3d que demandó el mercado argentino. El consumo en el mercado interno, en tanto, llegó a un promedio de 10 MMm3d, según el último reporte que dio, el 15 de abril, el expresidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Herland Soliz
A falta de información actualizada de YPFB, de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) o del Ministerio de Hidrocarburos, La Razón tuvo que recurrir a datos oficiales sobre las importaciones de gas natural desde Bolivia publicados en los sitios web de Transportadora Brasileira Gasoduto Bolívia-Brasil SA (TBG) y del Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas) de Argentina.
En conjunto, la comercialización de gas natural se ha situado en una media de 31 MMm3d, dos millones por encima de la producción media bruta obtenida en toda la gestión 2003, que llegó a 28,01 MMm3d. El dato de 2003 está publicado en la revista Gas & Desarrollo de YPFB, información mensual que ha sido discontinuada por la actual administración de la petrolera estatal.
En enero, la producción de gas natural alcanzó los 51 MMm3d debido a la mayor demanda del combustible, sobre todo del mercado brasileño, que llegó a nominar una media de 28 MMm3d. Esta información fue la última que publicó la petrolera estatal, el 4 de marzo de este año, en el “Segundo Informe Nacional de la Situación de YPFB”.
De acuerdo con esta información, la comercialización de gas natural en 2009 llegó a un promedio de 33 MMm3d. El pico más alto se dio en 2014, con 59 MMm3d, luego de lo cual se dio un progresivo descenso en la demanda hasta alcanzar una media de 45 MMm3d en 2019.
Contratos
La información estadística publicada en los portales de las empresas y entes reguladores de Brasil y Argentina dan cuenta que en abril hubo una menor demanda del energético boliviano, incluso por debajo de lo acordado contractualmente.
La cuarta adenda con Argentina establece, por ejemplo, un volumen mínimo de 11 MMm3d de gas natural para ese mes y, en el caso de Brasil, la octava adenda estipula una cantidad mínima de 14 MMm3d.