El Banco Central de Bolivia (BCB) se sumó a la presión para la aprobación legislativa de los créditos de organismos internacionales, tal como pide el Gobierno. Señaló que el uso de estos recursos es necesario para una reactivación ordenada de la economía y para preservar la estabilidad macroeconómica.
El Ejecutivo protesta contra el Movimiento Al Socialismo (MAS) en la Asamblea Legislativa y lo acusa de “bloquear” la autorización de los préstamos (que ascienden a $us 1.054 millones), sobre todo los $us 327 millones del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Incluso, la presidenta transitoria Jeanine Áñez condicionó la entrega del nuevo Bono Salud, de Bs 500, al aval de estos créditos. Desde el MAS, indicaron que el Gobierno no cumplió hasta ahora con todos los requisitos para viabilizar los recursos, como la información sobre las condiciones, los intereses y el destino del dinero.
Mediante un comunicado, el BCB señala que “el impacto de la pandemia en prácticamente todas las economías del mundo es mayor al esperado. Los necesarios cierres sanitarios afectaron los ingresos de las familias, empresas y Estados, y han obligado a estos últimos a emprender considerables gastos en el ámbito de la salud; así como grandes programas de apoyo a sus aparatos productivos”.
Añade que estos gastos fueron asumidos en gran parte por fuentes internas, donde los bancos centrales asumieron el protagonismo, empero, con la reacción de la comunidad internacional, los países han recurrido al financiamiento externo. Y remarca que el BCB respondió otorgando liquidez al sistema financiero, aplicando medidas para mantener la cadena de pagos en funcionamiento y apoyando al sector productivo y hogares con créditos que tienen históricas tasas bajas de interés.
“Es claro que una reactivación ordenada y efectiva a la crisis sanitaria demandará aún más esfuerzos. Sin embargo, el Directorio del BCB señala de manera enfática que para lograr esto son necesarias inyecciones de recursos frescos a la economía, los cuales, deben provenir fundamentalmente del exterior”, complementa.
A la par, pide un esfuerzo entre el sector privado, el Gobierno y el BCB, y un “entendimiento entre los Poderes del Estado”. Y solicita que para “preservar la estabilidad macroeconómica y los necesarios equilibrios, se utilice financiamiento internacional, coadyuvando a viabilizar la implementación de medidas monetarias y fiscales expansivas, como se está realizando en el resto de los países en aras de la reactivación económica”.
El 21 de julio, el ministro de la Presidencia, Yerko Núñez, admitió que “el Tesoro General de la Nación (TGN), desde hace cuatro meses, no registra ingresos porque hasta el pago de impuestos se paralizó en medio de la pandemia. Entonces, la única forma de poder subsistir es con créditos”.
(28/07/2020)