La Asociación de Bancos Privados de Bolivia (Asoban), mediante su secretario general, Nelson Villalobos, expresó su rechazo al acuerdo entre el Gobierno y dirigentes del transporte para un periodo de gracia de seis meses en pos de una reprogramación o refinanciamiento de créditos bancarios de los prestatarios. Lo calificó como un “peligroso antecedente para la cultura de pagos” y advirtió que provocará la falta de recursos para la otorgación de créditos y la consiguiente reactivación económica.
En conferencia de prensa, Villalobos aclaró que el “periodo de gracia” es, en la práctica, “un nuevo diferimiento de seis meses adicionales a los 10 meses del año pasado que viene afrontando el sistema financiero. Para nosotros esta medida representa un duro golpe para el sistema financiero y pone en peligro la estabilidad del sistema financiero, dada la heterogeneidad de las entidades que lo componen”.
El miércoles, tras un paro nacional del transporte público en demanda de un nuevo diferimiento para el pago de préstamos bancarios, el Gobierno y sectores de los choferes acordaron el periodo de gracia de seis meses, cuando anteriormente el Ministerio de Economía había definido uno de cuatro meses como mínimo, y advertido que un nuevo diferimiento sería riesgoso para el sistema financiero. Sin embargo, otro sector del transporte público anunció un paro de 48 horas para la siguiente semana.
“Hoy estamos frente a un periodo de gracia de seis meses, en los que la banca y el sistema financiero no van a percibir ni los intereses ni el capital. Entonces consideramos que esto representa una amenaza a la estabilidad del sistema financiero. El sistema financiero, y la banca en particular, no entienden este súbito cambio que se ha producido en la posición de las autoridades”, remarcó el secretario general de la Asoban.
Asimismo, alertó que el acuerdo genera un “peligroso antecedente para la cultura de pagos”. “Consideramos que se está vulnerando la cultura de pagos, lo que provocará la falta de recursos líquidos para el sistema financiero y posterga aún más la capacidad el sector para apoyar a la reactivación económica”.
“El país pasa por una crisis económica y sanitaria, y con este diferimiento adicional se pone en riesgo la estabilidad del sistema financiero, lo que creará condiciones desfavorables para acceder a recursos frescos por parte de otras empresas, emprendedores, gente que hoy necesita acceder al crédito para retomar sus actividades, sus negocios, en muchos casos para fortalecerse, capitalizar sus actividades, para afrontar lo que todavía seguirá como crisis sanitaria”, afirmó Villalobos.
(14/01/2021)