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Tres episodios marcan la crisis del Banco Fassil

Banco Fassil

Mucha gente hizo largas filas intentando sacar su dinero del Banco Fassil. Foto: APG

La crisis del Banco Fassil, que este martes llevó a la detención por delitos financieros de cuatro de sus altos ejecutivos, tiene este año tres capítulos clave que marcaron la crisis de esta entidad.

CAPÍTULO 1. FILAS Y PROTESTAS

El primero ocurrió el 14 de marzo, cuando los clientes del banco denunciaron que no podían retirar dinero de sus cuentas ni de los cajeros automáticos. Se formaron largas filas y la protesta creció. La Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (Asfi) salió al paso para aclarar que la entidad estaba bajo un sistema de supervisión.

La entidad reguladora garantizó que los clientes del Banco Fassil no perderían sus ahorros y explicó que la entidad no fue intervenida; sino que está bajo un plan de regulación “para superar algunas debilidades”.

Mediante un comunicado, el Banco Fassil dijo que era objeto de una escalada irregular de especulaciones y rumores. Desmintió estar intervenido o en quiebra y aseguró que la sobrerreacción de cuenta ahorristas que procuraban retirar sus depósitos generó el desabastecimiento de efectivo y la saturación de sus sistemas físicos y digitales.

El 15 de marzo, se conoció que la Asfi detectó que este banco incurrió en una causal relativa a prácticas que ponen en peligro los depósitos del público, pues habría dado créditos a personas que no demuestran capacidad de solvencia.

Según el canal DTV, la Asfi observó nueve operaciones de crédito otorgadas a personas insolventes, los montos oscilaban entre Bs 21.000 y 35.000.

CAPÍTULO 2. SUSPENSIÓN DE TARJETAS

El conflicto derivó en que mucha gente retire sus ahorros y depósitos del banco, lo que generó más problemas para la entidad.

El 17 de abril, mediante un comunicado, el Banco Fassil anunció a sus clientes la inhabilitación temporal de los servicios de tarjetas de débito, crédito y prepagadas para operaciones nacionales e internacionales. La entidad bancaría indicó que atraviesa una situación difícil debido a la “desestabilización” que surgió en el último mes.

“Nos dirigimos a ustedes para abordar la situación desafiante que estamos enfrentando como institución financiera, debido a la desestabilización que ha surgido en este último mes. Y solicitar su colaboración en estos momentos difíciles”, decía la nota publicada en redes.

Aseguraba, además, que hay disposición para superar los obstáculos e hizo un llamado a sus ahorristas y clientes para que sigan confiando en la entidad. “Sus ahorros y su lealtad son vitales para recuperar nuestra plena operatividad”.

En esa ocasión, la Asfi también salió a aclarar una y otra vez que los ahorros y depósitos de los clientes están garantizados.

El director ejecutivo de la entidad reguladora, Reynaldo Yujra, señaló que, pese a existir alguna dificultad en cualquier entidad financiera del país, el dinero de los ahorristas no corre riesgo.

El anuncio generó nuevamente que la gente realice largas filas en las agencias del banco intentando retirar su dinero. Muy pocos lo consiguieron, pues la entidad limitó la entrega de efectivo y generó masivas protestas.

Lea más: Cuatro altos ejecutivos del Banco Fassil, aprehendidos por delitos financieros

CAPÍTULO 3. VENTA DE BIENES Y DETENCIONES

Este martes, la situación empeoró. Con largas filas en sus agencias y la falta de liquidez, la institución, mediante un nuevo comunicado, anunció que pone a la venta varios bienes inmuebles, con precio en bolivianos.

“Se pone a disposición al público, inversionistas y sector inmobiliario, bienes inmuebles fuera de uso, en uso y adjudicados con precio en bolivianos como una forma de apoyar la bolivianización en el país”, dice el comunicado.

El Gobierno, mediante el vocero presidencial Jorge Richter, sugirió el sábado pasado al Banco Fassil analizar la venta de sus bienes ante la iliquidez por la que atraviesa.

Apenas unos minutos después de hacer público el comunicado de venta de sus inmuebles, se conoció la orden de aprehensión contra cuatro altos ejecutivos del banco, en Santa Cruz.

La denuncia fue presentada por la Asfi por delitos financieros.

Los aprehendidos son: Ricardo Mertens Olmos (presidente ejecutivo), Jorge Arturo Chávez Vargas (gerente general), Hermes Hugo Saucedo Camacho (ejecutivo) y Hernán Suárez Vaca Diez (ejecutivo).

Se trata de las máximas autoridades del banco y pasarán la noche en celdas de la Fuerza Especial de Lucha contra el Crimen (FELCC) cruceña. Los cuatros ya están declarando ante las autoridades y aguardarán la audiencia de medidas cautelares.