Gobierno libera segunda semilla de soya modificada genéticamente para la siembra de verano
De acuerdo con la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO), la incorporación de la biotecnología permitirá que los productores enfrenten las condiciones climáticas adversas.

El ministro de Desarrollo Rural y Tierras, Yamil Flores, y el presidente de la Cámara Agropecuaria del Oriente, José Luis Farah.
El ministro de Desarrollo Rural y Tierras, Yamil Flores, anunció este lunes la autorización para el uso de una segunda semilla biológicamente modificada de soya en Bolivia, específicamente diseñada para la campaña de siembra de verano.
Este avance busca cumplir el compromiso gubernamental de mejorar el rendimiento y la resistencia de los cultivos de soya en el país.
La nueva tecnología, conocida como “HB4”, se desarrolló en Argentina por científicos de la Universidad Nacional del Litoral y el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet).
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Semilla
Esta semilla, según explicó Flores, incorpora un gen de girasol que le permite resistir condiciones de sequía, lo que la hace particularmente útil en regiones propensas a la falta de agua.
La liberación de esta semilla se gestionó por la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo) y la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO), encabezada por José Luis Farah, quien destacó el apoyo del Gobierno en el proceso.
Según Farah, la incorporación de esta biotecnología ayudará a los productores a enfrentar desafíos climáticos y mejorar la eficiencia en sus cultivos.
Biotecnología
Además, recalcó que esta es la segunda semilla de soya transgénica que se aprueba en Bolivia, después de la liberación, el 19 de octubre, de otra que también cuenta con características avanzadas de protección.
Con la autorización de estas dos semillas transgénicas, la CAO espera que se facilite la incorporación de biotecnología para otros cultivos clave en el país, como maíz, trigo, caña de azúcar y algodón, a fin de fortalecer la seguridad alimentaria y el desarrollo económico del sector agrícola.
De acuerdo con Farah, la biotecnología también permitirá que la capacidad de producción incremente, lo que, en su criterio, permitirá un mayor ingreso de divisas al país.
El Gobierno, por su parte, espera los análisis y resultados de la modificación genética de estos productos, precautelando el bienestar de la población.