La periodista y exconcejal Rocío Molina habla sobre el camino recorrido en el mundo y el país en cuanto a la participación de la mujer en la sociedad, economía y política. Si bien hay mejoras, muchos desafíos persisten al presente. Luego de su paso por BTV, hoy se desempeña en el sector energético. La profesional brinda detalles sobre las políticas públicas que, en lo referido a la energía, favorecen al género femenino. También aborda la cuestión de la todavía limitada participación de ellas en el área de los combustibles y las renovables.
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MUJER
—¿Cómo se podría caracterizar la situación de la mujer en el mundo hoy en día?
—Creo que al igual que la pobreza, las desigualdades de género persisten y lo harán mientras continúen perviviendo las estructuras violentas que las sustentan. En tanto no se cambie estructuralmente el enfoque de género y la igualdad de oportunidades, seguiremos asistiendo al deplorable resultado de la violencia contra las mujeres en feminicidios y abusos sexuales, pero también en formas más sofisticadas de violencia y exclusión como el acoso sexual, la dependencia económica, la falta de acceso a la educación, la violencia obstétrica y de salud. En fin, a lo que me refiero es que la lucha por igualdades es muy compleja e involucra el habitus de hombres y mujeres, es decir un reseteo de los estereotipos.
—¿Qué está pasando en Argentina y El Salvador y el crecimiento de movimientos antifeministas?
—Creo que es el mismo sistema que se defiende e intenta mantener un status quo en la sociedad. Por ello, vemos una tendencia a demonizar al movimiento feminista y descalificar los logros de los movimientos de defensa de la igualdad de género, que no solo han soñado con una sociedad equitativa entre hombre y mujeres, sino también es el estandarte de la lucha de derechos en favor de los indígenas y los colectivos trans. Es decir, una lucha de defensa de derechos humanos, que hoy está siendo cuestionada por esta oleada conservadora y discriminadora que se cierne sobre varios países.
—¿Cuál es la situación actual de la mujer boliviana en lo que hace a la reivindicación de sus derechos y su participación en la economía, la política y la gestión pública?
—En Bolivia para nadie es desconocido el avance que se ha logrado en favor de la equidad de género gracias a la lucha de las mujeres y un Gobierno progresista que ha compartido su agenda; es decir, la prioridad de mejorar las condiciones de vida de la población. Aquí quiero destacar grandes políticas públicas como lucha contra la mortalidad materno infantil, con el bono Juana Azurduy de Padilla, al igual que la ampliación del derecho al subsidio alimentario, el bono Juancito Pinto, el bono dignidad, en salud, acceso a vacunas y atención gratuita. El presidente Luis Arce ha trabajado sobre este tema como una prioridad con el proceso de industrialización para que estos beneficios sean sostenibles para todos los bolivianos. Me siento orgullosa de ver cada vez más mujeres siendo profesionales, políticas y emprendedoras, luchando por sus sueños y desafiando los estereotipos. Sin embargo, aún queda el desafío que muchas se quedan en el camino, no concluyen su carrera, son sometidas a trabajos precarios, prostitución, trata o víctimas del embarazo adolescente. Son realidades en las que el Estado debe trabajar con políticas públicas para ofrecer mejores condiciones a las mujeres en situación de vulnerabilidad. Aquí quiero destacar los préstamos que el Gobierno realiza en el programa del BDP, ofreciendo facilidades y bajos intereses a mujeres jefas de hogar. Creo que debemos avanzar en la reflexión de una economía del cuidado, ya que muchas mujeres no concluyen sus carreras o no logran una vida igualitaria en el ámbito laboral y económico debido a que no existen centros de cuidado para los niños, ancianos y personas con discapacidad. Este trabajo es asumido generalmente por las mujeres e infravalorado ante la sociedad. La ley de lucha contra toda forma de violencia es un gran logro muy importante porque reconoce el feminicidio como un delito público e identifica a la sociedad como una instancia corresponsable. Aun así, queda mucho por trabajar para hacerla más operativa y evitar que el sistema judicial se convierta en otro verdugo de la propia ley. Creo que se ha avanzado de manera significativa en el empoderamiento de las organizaciones sociales y, con ellas, la participación de la mujer en la política. La ley de paridad ha permitido que las mujeres ocupen cargos y curules como autoridades electas. Todavía debemos trabajar muchísimo en el empoderamiento de liderazgos en la arena política y hacer realmente efectiva la ley contra el acoso político. Ojalá en los próximos años tengamos más alcaldesas, gobernadoras, magistradas, diputadas, senadoras y, por supuesto, candidatas a la presidencia y vicepresidencia. La participación de la mujer en el campo económico es vital en nuestra sociedad, ya que la mujer se constituye en una administradora de la pobreza, pero también en una gran administradora de emprendimientos, negocios y comercio. Sin duda que en las últimas décadas ellas van copando espacios formales y no formales en el mundo de los negocios y el comercio.
—¿Cuál es la situación de la mujer boliviana en el sector energético del país?
—Desde el sector energético existen grandes avances en beneficio de las familias bolivianas, donde las mujeres y las niñas se ven beneficiadas como en el caso de los proyectos de electrificación rural ya en una cuarta versión del programa beneficiando a millones de familias con luz eléctrica. Inequívocamente las mujeres son grandes beneficiarias porque permite que con la luz eléctrica se puedan tener facilidades en el trabajo doméstico, empresarial e industrial, además de mayor acceso a la educación y la salud. Quiero destacar proyectos de gran impacto para las ciudades como el de la Transición de Iluminación Eficiente y el Desarrollo de Energías Renovables Nacional, generando seguridad ciudadana y acceso a tecnología en los lugares más recónditos del territorio. En el tema nuclear fue grande el impacto de la Agencia Boliviana de Energía Nuclear (ABEN) en la vida de las mujeres con cáncer, mejorando sus condiciones de vida y llevando esperanza. En el sector energético también quiero destacar un programa que ha sido un éxito porque lleva gas natural a todos los hogares, se trata del proyecto de redes de gas, gracias a esta política, muchas mujeres en sus casas, mercados y comercios pueden desarrollar su emprendimiento con bajos costos. El rol de la mujer en el sector energético es protagónico y fundamental como beneficiarias, sin embargo, aún resta que las mujeres profesionales en el área petrolera, eléctrica, nuclear, encuentren espacios jerárquicos de mayor decisión. Actualmente son pocas las directoras, gerentes y presidentas. Hay profesionales mujeres de gran valía que están ganando terreno. Actualmente dos de las nuevas áreas de tecnología e industrialización del sector energético, como son el litio y la nuclear, están liderizadas por dos mujeres profesionales de gran prestigio.
—¿Qué mensaje les daría a las universitarias y profesionales mujeres jóvenes que buscan integrarse a la actividad productiva, la política o la gestión pública?
—Que todo lo que se propongan lo hagan con pasión y compromiso, y eso no es difícil porque a las mujeres desde niñas se nos enseña de fortaleza y a nunca rendirnos. Esa es la clave, ser perseverantes y consecuentes. Creo que estamos viviendo tiempos en el que las mujeres han ganado protagonismo por sus logros. Quiero pedirles a las jóvenes, lideresas, empresarias, comerciantes y profesionales que defiendan las conquistas que se han logrado hasta el momento, que no permitan retrocesos, porque somos el resultado de las luchas de nuestras organizaciones y de grandes mujeres revolucionarias. Hay mucho trabajo por hacer y dejar a nuestras generaciones futuras, como lo hicieron nuestras abuelas y madres, que el fin fundamental es trabajar por mejores condiciones de vida para la familia boliviana, y allí, el bienestar de las niñas, jóvenes, adultas y ancianas son un pilar fundamental para una sociedad próspera y moderna.
PERFIL
Nombre: Rocío Molina
Cargo: Asesora en el Ministerio de Hidrocarburos y Energías
Estudió Comunicación Social en la Universidad Católica Boliviana de Cochabamba y tiene un mágister en Comunicación Estratégica de la Universidad Andina Simón Bolívar. Tiene 26 años de experiencia periodística en televisión. En el ámbito académico, fue jefa de carrera de Periodismo y Comunicación en la Universidad del Valle en 2011. En el campo político, ocupó el cargo de concejal municipal de la ciudad de Cochabamba desde el 31 de mayo de 2015 hasta el 3 de mayo de 2021, luego como gerente general del canal estatal Bolivia TV desde el 7 de junio de 2021 hasta el 31 de diciembre de 2022. Actualmente, ejerce funciones como asesora en el Ministerio de Hidrocarburos y Energías.