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El alma de disco party

Un añejo programa se renueva todos los días para encontrarse con audiencias. Disco Party (DP) se transmite en Oruro desde hace 40 años bajo la conducción de Víctor Hugo Irahola. La revista musical nació en radio Bolivia en 1978, gracias al empuje de una nueva discoteca. “Hasta ese año, en Oruro había unos tres nightclub, me gustaba mucho el trabajo de la música, era disc-jockey (DJ) presentábamos discos, novedades y primicias musicales”, recuerda Irahola.

Jamás pensó en entrar al mundo de los DJ, pero su vida cambió gracias a una invitación de Carlos Jáuregui, que abrió el Sounder Nightclub motivado por la película Fiebre de sábado por la noche. “Por entonces yo reemplazaba a Raúl Rojas (+) en radio Bolivia, donde se decidió hacer un programa con el nombre de Disco Party, que nace de la tapa de un disco de variedad de temas musicales. En principio era un ‘enlatado’ editado por Rómulo Quintana, que salió al aire por primera vez de 18.00 a 19.00 el 4 de julio de 1978”.

Luego de tres meses, DP pasó a radio El Cóndor en horario matinal.  Después a la emisora militar Batallón Topáter. “DP empezó a gustar al oyente, la cosa funcionó bien por la música de Michael Jackson, los Bee Gees, Village People y otros. El objetivo era presentar esta música a través de un programa radial, hasta hicimos programas en vivo los domingos desde la discoteca Sounder en la década de 1980”.

En 1994, Irahola creó la radio WKM y DP  presenta todos los sabados, a las 19.00, la música de las décadas de 1970 y 1980. “Hay gente a la que le gustaba escuchar este tipo de música por radio y a otros en la discoteca, por lo que es radio y baile. Es un género interesante que no ha pasado de moda, hoy los jóvenes también lo buscan, es lo que llamamos ‘años maravillosos’. Hoy no solo difundimos, sino que hablamos de la historia de esa música”.

Dora Mollinedo, la esposa de Víctor Hugo, fue el timón que le impulsó para seguir adelante en la empresa de comunicación, al igual que toda la familia: las iniciales de los nombres de sus hijos Wendy, Kevin y Marcelo forman la sigla que bautiza a WKM FM 91.3. “Yo nací para esto, es mi vida, es mi oxígeno, no conozco vacaciones, si dejo el micrófono es perder la comunicación con el oyente y significa empezar de nuevo”.

Ilustración: Frank Arbelo