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Christian Pennycook: contra las etiquetas

Las calles de San Miguel son una pasarela más para Christian Pennycook: la elegancia de su andar siempre destaca. Él enseñó a muchas reinas de belleza del país a mantener el porte al caminar en tacones. Fueron los zapatos de taco alto y la danza los que lo sumergieron en el mundo de la belleza y el diseño.

Es mediodía y acaba de dar clases en Belleza Imagen y Técnica, Academia de Belleza Integral, emprendimiento creado por él para capacitar a modelos y representantes de la belleza femenina y masculina. “Yo estudié danza y como bailarín me llamó la atención el trabajo de maquillaje y estaba en constante contacto con el mundo del modelaje. Después aprendí stiletto dance (danza con tacones) y a caminar muy bien en tacones”.

Con danza y sobre tacones es que aprendió a perfeccionar su caminar. “La esencia es la postura. La danza ha sido el pilar fundamental, me ha ayudado mucho a mostrar que modelos o representantes de belleza no deben ser solo un maniquí o el rostro de una marca, deben —a través del dominio de sus cuerpos— proyectar una identidad propia”.

Con esas armas comenzó a trabajar como couch en la academia de modelaje de Carolina Urquiola, donde ayudó a varias misses a perfeccionar su andar. Cuando Urquiola se mudó a Santa Cruz, Christian decidió abrir su propia academia. “Quiero que el modelaje y la industria de la moda puedan ver más allá, romper los tabúes, donde no importe cuánta plata ganemos, sino que podamos hacer lo que querramos”.

De forma paralela fue naciendo en él la inquietud por el diseño, pues veía que la moda que llegaba al país imponía modelos muy verticales para hombres o mujeres.

“Estudié Diseño de Modas en VC Fashion School y ahí me apoyaron mucho, me enseñaron varias técnicas y me dieron la formación básica sobre los patrones, las telas, etc.” Salió de esos estudios con una marca personal: Alta Piel.

“Me baso en un estilo que no tiene género, que es personal. Busco la innovación futurista, prendas más ajustadas, zapatos con un poco más de tacón. Me encanta proyectar seguridad, confianza, me gusta que la gente me mire como si yo fuera una puerta: una que se abre a las nuevas ideas, oportunidades y atmósferas”.