Oscar 2025: triunfos inesperados y el fin del sueño americano
La comunicadora y periodista Isabel Navia desgrana la última edición de los premios de la Academia de Cine de Hollywood.
La nonagésima séptima edición de los Premios Oscar de la Academia ha dejado un sabor agridulce entre críticos y espectadores. Con «Anora» como la gran ganadora de la noche, acumulando cinco estatuillas incluyendo Mejor Película y Mejor Director para Sean Baker, la ceremonia reveló tendencias interesantes sobre el rumbo de Hollywood y su relación con la realidad social contemporánea. La comunicadora y periodista Isabel Navia, quien cuenta con una amplia trayectoria cubriendo cine y cultura, nos ofrece su análisis sobre los ganadores, las controversias y lo que estos premios evidencian sobre la industria cinematográfica actual.
La ceremonia, conducida por primera vez por el comediante Conan O’Brien, logró captar la atención de 19.7 millones de espectadores estadounidenses, aunque el evento continúa perdiendo el brillo de antaño. Navia observa que «los premios Oscar ya no tienen el mismo peso. Creo que su audiencia es cada vez menor, al menos en Estados Unidos». Sin embargo, destaca que este año la ceremonia tuvo aspectos positivos: «Ha sido una buena ceremonia en general, en relación a las anteriores. Ha habido algunos cambios en cómo la han diseñado”.
A diferencia de ediciones pasadas, Navia resalta que «la elección del presentador ha sido acertada. Otras veces han metido la pata profundamente con los presentadores. Este lo ha hecho bastante bien, lo ha manejado bien la ceremonia y el ambiente”.
Los Oscar y el fin del sueño americano
Quizás la mayor sorpresa de la noche fue ver a «Anora» de Sean Baker coronarse como Mejor Película. Para Navia, esta victoria es inesperada pero reveladora: «Es como que le den un premio al cine radical. Él se dedica al cine marginal y lo premian. Además, con la historia de una bailarina de striptease”.
Nuestra invitada explica la relevancia de esta elección. «Me encanta la coincidencia con ‘El Brutalista’, que es otra de las ganadoras de la noche. Porque las dos son cuestionadoras de la situación actual: no hay el sueño americano”. Es precisamente esta coincidencia temática lo que para Navia resulta más fascinante: «El capitalismo salvaje nos está matando, eso entiendo de esas dos películas, y me gusta que te digan que el sueño americano no está ahí. No es lo que nos han dicho y que hayan premiado eso, es algo significativo”.
«El Brutalista», que le valió a Adrian Brody su segundo Oscar como Mejor Actor, es descrita por Navia como «una película monumental en todo el sentido de la palabra» que ha tardado «más de cinco años en producirse”. Para la comunicadora, esta obra es «tan compleja y súper completa y hermosa, y por algo dura tres horas y media que se pasan sin sentirlo”. Sin embargo, también observa que parece «fabricada para el Oscar”.

El fenómeno de «Emilia Pérez»
Una de las mayores controversias de esta temporada de premios fue «Emilia Pérez», que a pesar de recibir trece nominaciones (convirtiéndose en la película de habla no inglesa con más menciones en la historia), solo obtuvo dos estatuillas.
«Emilia Pérez ha sido el gran fiasco de la temporada de premios. La vi con la mejor intención, traté de desprenderme de toda la información previa que me había llegado, pero no pude. Creo que es superficial en su tratamiento”, asevera Navia.
La periodista cuestiona duramente la película. «Tiene textos que parecen traducidos por la versión 1.0 de Google. Tiene escenas muy absurdas. Y aunque logra algunos momentos creativos, no logra hacer lo que pretende”. Agrega que “es muy llamativo que los jurados de festivales hayan quedado asombrados favorablemente» y plantea que esto se debe a que «son fáciles de impresionar porque no conocen la realidad de la que la película cree que retrata”.
«Es una historia que no llega a ser nada de lo que vende. Ni un retrato de narco, ni un musical, ni una realización de las personas transgénero. No es ni chicha ni limonada”, sentencia Navia.
A pesar de estas duras críticas, la especialista identifica algunos méritos. «Las actuaciones son buenas, en general. Hay que reconocerlo. La de Zoe Saldaña, la de Adriana Paz y Karla Sofía Gascón”. Estos comentarios explican en parte por qué Zoe Saldaña logró llevarse el Oscar a Mejor Actriz de Reparto, convirtiéndose en la primera estadounidense de origen dominicano en ganar un Oscar.
La marginación a Denis Villeneuve
Otro de los grandes temas que destaca Navia es la incomprensible marginación de «Duna: Parte 2″ y su director Denis Villeneuve. A pesar de obtener dos premios técnicos, la película fue ignorada en las categorías principales. » Duna II es una película épica que marca un antes y un después en el género, en varios sentidos, además. Es una película filosófica. Es una pieza de relojería en lo técnico. Es asombrosa”.
La crítica es contundente respecto a la omisión de Villeneuve entre los nominados a Mejor Director. «El trabajo de dirección ha sido ignorado de una manera imperdonable. El señor Villeneuve debió estar incluido en la lista”.
Los Oscar y las grandes actuaciones
En cuanto a las categorías de actuación, Navia considera que los premios fueron, en general, bien otorgados, destacando especialmente el trabajo de Kieran Culkin como Mejor Actor de Reparto por «A Real Pain»: «Kieran Culkin es un actor poderoso, fuerte, de gran personalidad, que hace que esta película llegue a ser lo que es”.
Sobre Adrian Brody, ganador como Mejor Actor por «El Brutalista», la crítica señala que «lo hace muy bien, es un tipo de personaje que él ya conoce, es muy parecido al anterior por el que ya ha ganado un Oscar (con El Pianista, 2002)”. Sin embargo, confiesa que hubiera preferido a otros nominados: «Yo me hubiera quedado entre Colman Domingo (Sing Sing) y Ralph Fiennes (Cónclave), que los dos me han parecido absolutamente deslumbrantes”.
En cuanto a Mikey Madison, quien a sus 25 años se convirtió en la novena actriz más joven en ganar el premio a Mejor Actriz por «Anora», Navia la considera junto a Demi Moore (La sustancia) merecedoras por igual. «Demi Moore es fantástica, es más, yo hubiera dado el Oscar a las dos, a Demi Moore y a Nicky Madison, las dos están de lo mejor”.

El triunfo inesperado de los independientes
Uno de los aspectos más destacables de esta edición es el reconocimiento a producciones modestas pero poderosas. Navia celebra el premio a Mejor Película Animada para «Flow», la primera película animada independiente en conseguir esta estatuilla. «Es una película humilde pero auténtica. Y de un país cuyo nombre nadie se acuerda (Letonia). Hecha con recursos modestos y sin pretensión”.
La comunicadora y cinéfila destaca el impacto que este tipo de reconocimientos tiene. «Darle el premio marca un antes y un después para un equipo de realizadores como este. Y la forma en que los han recibido en su país es tremendamente emocionante. Se ha generado toda una fiesta. Ahora son un orgullo nacional”.
Otro ejemplo notable fue «A la sombra del ciprés», ganadora como Mejor Cortometraje Animado. «Este corto en particular fue muy difícil de hacer para sus realizadores. Les ha tomado seis años. Hay que imaginar eso. Les ha tomado tanto tiempo como a ‘El Brutalista’ y dura 19 minutos. En condiciones súper complicadas: en Irán, con malos equipos, con cortes de energía y sin presupuesto”.

El documental y su poder político
En un año marcado por tensiones geopolíticas, el premio a Mejor Largometraje Documental para «No Other Land» adquirió especial relevancia. «Me alegra mucho que se haya premiado a No Other Land. Porque es un premio que da un mensaje poderoso. Ha sido hecho por un equipo palestino-israelí. Y eso es muy importante en este momento», explica Navia.
Esta victoria hizo historia al convertirse en el primer filme palestino en obtener un Oscar, con su codirector Basel Adra siendo el primer cineasta de esa nación en recibir este reconocimiento. La crítica destaca el mensaje de los realizadores en la ceremonia de entrega de los Oscar: «Tenemos que acabar con las injusticias que están sucediendo. Que están dando por la campaña militar de Israel en Gaza. Y nosotros dos estamos trabajando juntos. Y creemos que se puede trabajar juntos para hacer la paz”.
Los Oscar, un reflejo de la industria
Para Isabel Navia, estos Premios Oscar 2025 revelan tanto las virtudes como los defectos de una institución que lucha por mantenerse relevante en un panorama cinematográfico y cultural en constante cambio: «Es una institución ya bastante desgastada. Llevan para los 100 años. Y necesitan renovarse. Pensar cómo subsistir los siguientes 100 años. Porque si siguen igual. Van a estar cada vez peor”.
A pesar de esto, la periodista reconoce el poder que aún tienen estos galardones para visibilizar cine importante y transformar vidas. «Todavía hay algunos logros con un valor real”, asevera.
Los Oscar 2025 quedarán en la memoria como la edición que premió el cine que cuestiona el mito del sueño americano, que dio voz a realizadores independientes de países periféricos y que reconoció la excelencia actoral. Navia advierte que «la Academia ha ninguneado a muchos durante décadas. No es la primera ni será la última”. La pregunta que queda flotando es si la institución logrará reinventarse para los próximos cien años o si continuará su lento declive en relevancia y prestigio.