“‘Chanfle’, ‘rechanfle’, ‘lo sospeché desde un principio’, ‘se me chispoteó’ o ‘no contaban con mi astucia’, son palabras muy mexicanas y de los personajes de Chespirito que dejan huella en el lenguaje de mucha gente”, dijo el comediante David Santalla. Como él, varios humoristas nacionales opinaron sobre el legado que deja Roberto Gómez Bolaños en Bolivia tras su partida ayer a sus 85 años.
Santalla comentó que “es alguien que ha visitado nuestras casas, ha visitado nuestras familias, él nos ha dejado sus personajes. Tengo que homenajearlo a nombre de la sociedad de actores de los artistas bolivianos porque muchos de ellos se han identificado con él”.
Su capacidad en la escritura le dio el apodo de Chespirito, un diminutivo castellanizado que hacía referencia al dramaturgo William Shakespeare. “Para mí fue una inspiración permanente. Desde que era jovencito veía su capacidad de escritor, luego de actor, director, y a mí me ha inspirado a imitar sus pasos, pero guardando las distancias”, señaló el cineasta Roberto Calasich, quien en sus producciones explora la comedia.
“Siento un profundo respeto, porque ha trascendido del humor hacia su grande expresión, mostrar al hombre simple. A partir de esto nos provocaba la risa y reflexionar sobre el latinoamericano común. En el fondo nos mostraba la capacidad de reírnos de nosotros mismos y de nuestras desgracias”, agregó Calasich.
Su capacidad creativa lo llevó a engendrar personajes cuyos nombres siempre iniciaban con la letra CH, como el Chómpiras, el Chavo, el Chapulín y el doctor Chapatín. “Todos los personajes con CH vienen a ser los representantes del latinoamericano común, ése que está desfasado de la historia”, agregó Calasich.
Agustín ‘Cacho’ Mendieta, también humorista, calificó la muerte del mexicano como una gran pérdida. “Sentida es la sensible desaparición de un escritor y buen creador de comedias, escritor y poeta que se ha dedicado mucho a las letras y ha influido tanto en Bolivia como en Latinoamérica”, indicó Mendieta.
El boliviano recordó que Gómez Bolaños también incursionó en telenovelas y el cine y que sus personajes tocaron el corazón de mucha gente. “Han habido grupos en Bolivia que han imitado a sus personajes, a aquellos que habitaban la vecindad”. Los comediantes coincidieron en que Chespirito ha dejado una simiente tanto en Bolivia, Latinoamérica como a nivel mundial por el mensaje fuertemente social que supo imprimir en sus producciones.
“Dejó un mensaje de convivencia igualitaria, mostró al niño huérfano que tiene hambre y siempre está a la expectativa de un sándwich, que en México le llaman torta de jamón”, precisó Mendieta. Así, las diferencias económicas y sociales entre personajes como don Ramón o doña Florinda se veían o entre un niño como era El Chavo u otros como Quico, La Chilindrina o Ñoño. “Podemos ver al educador representado en el Profesor Jirafales; el señor Barriga, que muestra el poder económico del dueño de la vecindad. Todo lo que se tiene de una sociedad mostrada en un mundo reducido”, dijo el comediante.
El humorista y actor Enrique Koch calificó al desaparecido como un referente latinoamericano de las últimas décadas. “Es la figura que a los comediantes nos sirve de guía, un revolucionario del arte que será referencia para todos. Marcó nuestra infancia y nuestra forma de concebir el arte de hacer reír y tocar el corazón”.
El comediante de stand up boliviano radicado en Buenos Aires Javicho Soria fue más crítico y opinó que si bien el mexicano influyó en el mundo del humor y la comedia, “se estancó y no propuso mucho más, aunque lo que hizo fue tan poderoso que influyó en todos. Una virtud fue que Chespirito supo mezclar de forma divertida la verdad social con la comedia sin ser panfletario y sin ser obvio”.
Personajes en Bolivia
Barriga
En 1994, Édgar Vivar actuó en La Paz junto a la actriz Agar Delós.
Quico
Carlos Villagrán, Quico, que surgió en El Chavo, llegó a Santa Cruz en 2003.