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Está intacto el núcleo fuerte para afrontar la Agenda 2025

Tras nueve años de gobierno y un día después de asumir su tercer mandato consecutivo, el presidente Evo Morales decidió mantener intacto el núcleo fuerte de su gabinete. David Choquehuanca y Luis Arce, además de Juan Ramón Quintana, sostienen el derrotero del proyecto oficialista hasta 2020.

Pasadas las 07.15 de ayer, el Jefe del Estado señaló el norte que tomará su nueva administración para consolidar sus principales desafíos: sostener la bonanza y el crecimiento económico, cumplir con los proyectos de Estado pendientes y efectivizar la reforma al sistema judicial, según enumeró el experto en análisis político Marcelo Silva.

De 21 autoridades, solo ratificó a ocho, entre ellos Choquehuanca en Relaciones Exteriores, Arce en Economía y Quintana en Presidencia.  “Cambiar un ministerio donde trabaja muy bien es como paralizar, yo digo, tres meses; el hermano Álvaro (García) me dice ‘es paralizar seis meses’”, puntualizó ayer el presidente Morales en la posesión del nuevo gabinete ministerial en el Palacio Quemado.

Superministros. Según Silva, es la conservación de una estructura. Los tres ministros “son el pilar y el referente” de las políticas públicas del Gobierno. “De alguna manera, se van a convertir en superministros y van a ser muy importantes en la toma de decisiones políticas y económicas”, precisó.

El canciller Choquehuanca está junto al presidente Morales desde 2006 y se mantiene en la Cancillería, y como tal es portavoz del equipo ministerial del Gobierno. El jefe de la diplomacia boliviana, “aparte de ser un símbolo de la cosmovisión andina en el Gobierno, tiene la responsabilidad del más caro anhelo de la política exterior: el tema marítimo”, reflexionó Silva.

A él se suma el ministro Arce, una de las autoridades técnicas cuya gestión y resultados son constantemente destacados por el Presidente y es considerado uno de los “hombres fuertes” del Órgano Ejecutivo. Tiene el reto de confrontar una eventual crisis económica que se avizora debido a la baja del precio del petróleo en el mercado mundial y que afectaría al país en razón de que la base de la economía nacional es la venta del gas.

Parte de ese grupo es Quintana, quien, pese a que en 2010 ocupó la dirección de la Agencia para el Desarrollo de las Macrorregiones y Zonas Fronterizas (Ademaf), siempre estuvo en coordinación con Morales y el vicepresidente Álvaro García Linera.

“Son ministros que tienen un peso específico, no solo por la antigüedad o el tiempo que le acompañan al Presidente, sino por la capacidad, influencia y decisión que tienen en el entorno de Evo Morales”, apuntó Silva. Desde la primera elección del binomio, al que Morales calificó de “una yunta indisoluble” —en diciembre 2005 cuando obtuvo el 53,7% de los votos—, el entorno del Palacio Quemado se armó con profesionales e intelectuales para confeccionar un plan de gobierno de largo plazo. 

Ahora, la “obligación” del nuevo gabinete es efectivizar la Agenda Patriótica. Un plan —propuesto por Morales en la campaña electoral de los comicios generales de 2014 que ganó con el 61,36%— que traza los lineamientos del Estado en los próximos diez años.  “Este gabinete no solamente es un gabinete jurídico, económico, técnico; por encima de lo jurídico, por encima de lo económico y de lo técnico, es un gabinete político”, enfatizó Morales.

Desgaste. Producto de una serie de críticas tras la divulgación de la enfermedad que padecía una autoridad judicial, el exministro de Salud Juan Carlos Calvimontes fue blanco de muchas críticas. La analista Helena Argirakis calificó a esta cartera como una de las más desgastadas en 2014.

En su lugar se posesionó a Ariana Campero que, con sus 28 años, al igual que Alexandra Moreira, que ocupa la cartera de Medio Ambiente y Agua, se convierten en las más jóvenes del gabinete. El presidente Morales consideró que “hay que seguir incorporando a la juventud” dentro del aparato estatal. Silva precisó que esta señal indica una apertura en la renovación que impone el Jefe del Estado en el ámbito generacional y a través de los principios de equidad de género, que marcaron las políticas del Gobierno.

Plan 2025, la urgencia ministerial

Agenda

Evo Morales pidió al gabinete de ministros que, en el comienzo de su tercer mandato que finalizará el 22 de enero de 2020, priorice la aplicación de los  ejes de la Agenda Patriótica, una primera planificación que debería coronar en 2025.

Propuesta

Además, el cuerpo ministerial tiene la misión de instrumentar los 12 postulados principales del programa electoral que propugnó el MAS en los comicios de octubre de 2014.

Participación de la mujer  baja de 10 a 7 en gabinete

Para el inicio del periodo gubernamental en 2010, cuando el presidente Evo Morales asumió su segundo mandato, el gabinete contaba con diez mujeres; sin embargo, solo siete acompañarán al Mandatario en su tercera gestión, hasta el 22 de enero de 2020. Ana Verónica Ramos, Virginia Velasco, Ariana Campero, Alexandra Moreira, Lenny Valdivia, Nemesia Achacollo y Marianela Paco son estas autoridades.

En criterio del analista Marcelo Silva, la presencia de la mujer en el gabinete debe ser tomada no solo cuantitativa sino cualitativamente. “Las ministras asumen carteras de absoluta responsabilidad y de gran trascendencia”.   Silva destacó la permanencia de mujeres en carteras como las de Justicia y Transparencia. “Es un avance que se puede prolongar en la designación de autoridades en reparticiones descentralizadas del Estado como Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB)”.

Helena Argirakis: El género es circunstancial en la nómina

En la composición del gabinete se refleja un giro político en términos de los desafíos que el Presidente ya anunció para la nueva gestión.
Acompaña a la diversificación del modelo económico y el desafío de profundizar la industrialización y los objetivos de desarrollo humano. Este gabinete refleja esos objetivos, pero sobre todo el relacionado con la Justicia.

En ese sentido, es relevante la ratificación del ministro de Relaciones Exteriores, David Choquehuanca; del ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana; de la ministra de Desarrollo Rural, Nemesia Achacollo; del ministro de Minería, César Navarro; del de Economía, Luis Arce, y de Roberto Aguilar, que ocupa la cartera de Educación. De ellos, Choquehuanca, Arce y Quintana son como una especie de decanos dentro de los ministros.

Además, hay que destacar la renovación. Por ejemplo la designación de Hugo Moldiz como ministro de Gobierno y de Hugo Siles en la cartera de Autonomías. Hay un giro en torno a la política de Estado, es un desafío importante llevar gente que está comprometida políticamente que no necesariamente milita orgánicamente en el Movimiento Al Socialismo (MAS).

Son autoridades con experiencia, por eso es significativo, porque los gabinetes del presidente Evo Morales son de largo aliento. Me imagino que ha sido un proceso muy cauto. Sin embargo, en 2010 fue el año en el que más presencia femenina hubo, con diez ministras de 20. Esa participación se redujo.

Pero hay que precisar que la designación es una prerrogativa personal, creo que el género es una circunstancia, pero no es una determinante. Las mujeres tienen en la familia un rol que se convierte en óbice cuando se intenta equiparar con el ritmo del Presidente. Es un factor que imposibilita la designación femenina.

Helena Argirakis es experta en análisis político.