Cuatro años después del inicio de la crisis financiera mundial, lo peor parece haber quedado atrás. Sin embargo, la economía mundial sigue siendo frágil, ya que se mantiene la inestabilidad y el lento crecimiento en los países de ingresos altos.
Así lo sostiene el informe “Perspectivas Económicas Mundiales del Banco Mundial (BM)”, publicado en enero de este año.
“Pese a este lento crecimiento en los países de ingresos altos, las perspectivas para el mundo en desarrollo siguen siendo sólidas (aunque crecerán entre uno y dos puntos porcentuales menos que en el periodo previo a la crisis)”, afirma el estudio del organismo.
Para recuperar las tasas más aceleradas del pasado, las economías en desarrollo deberán concentrar su accionar en políticas nacionales que fomenten la productividad a fin de asegurar la solidez de su crecimiento a largo plazo. Según el Banco Mundial, el Producto Interno Bruto (PIB) mundial se habría expandido en 2,3% en 2012. Para el organismo en 2012, los países en desarrollo registraron una de las tasas más bajas de desarrollo económico en los últimos diez años y además se estima que el PIB se amplió en 5,1%.
Expansión. Se prevé que el crecimiento de los países en desarrollo se expandirá en 5,5% en 2013, para luego afirmarse en 5,7% en 2014 y 5,8% en 2015, asegura la información.
El BM también afirma que “el crecimiento en los países de ingresos altos sigue siendo débil”, con una magra ampliación del PIB de solo 1,3% en 2012, y se proyecta que siga lento y mantenga la misma cifra (1,3%) en 2013 para luego afirmarse gradualmente en 2% en 2014 y en 2,3% en 2015.
Las actuales proyecciones para la zona del euro indican que el PIB se contraerá en 0,1% en 2013 y regresaría a territorio positivo en 2014, subiendo poco a poco hasta 0,9% en 2014 y 1,4% en 2015.
Se espera la aceleración del intercambio mundial de bienes y servicios, que aumentó solo en 3,5% en 2012, se expanda en 6% en 2013 y en 7% en 2015.
Aunque atenuados, la economía mundial sigue enfrentando riesgos, advierte. Estos incluyen la paralización en el avance en la crisis de la zona del euro, problemas fiscales y de endeudamiento en Estados Unidos, la posibilidad de una caída brusca de la inversión en China y una interrupción del suministro mundial de petróleo.
En este entorno externo tan débil —el informe recomienda que— los países en desarrollo deberán estimular su propio crecimiento y para este fin fomentar el buen gobierno e invertir en infraestructura educativa y salud.
Dentro de los aspectos destacados en las regiones, se detalla que el crecimiento de Asia oriental y el Pacífico redujo su ritmo del 8,3% en 2011 a alrededor del 7,5% en 2012, en gran medida debido al debilitamiento de la demanda externa y a las políticas destinadas a detener la inflación aplicadas por China. Excluido este país, el crecimiento de la región se redujo menos debido a la fuerte demanda interna. Se prevé que el PIB regional repuntará al 7,9% en 2013, para estabilizarse en torno al 7,5% en 2015, con una expansión del 8,4% de la economía de China en 2013, antes de reducirse a 7,9% en 2015. Sin incluir a China, se pronostica que el crecimiento regional promedio será del 5,9% durante el periodo 2013-15, gracias a la fuerte demanda interna y a la intensificación de los flujos comerciales internacionales.
Se estima que el crecimiento del PIB de Europa y Asia central se desaceleró abruptamente de 5,5% en 2011 al 3% en 2012, a medida que la región enfrentó condiciones desfavorables, incluida una débil demanda externa, la reducción del nivel de endeudamiento de parte de los bancos europeos, la sequía veraniega y las presiones inflacionarias inducidas por los precios de los productos básicos. Según las proyecciones, el crecimiento regional repuntaría al 3,6% en 2013 y al 4,3% en 2015.
Las perspectivas a mediano plazo dependerán fundamentalmente de los avances en la adopción de medidas para abordar los desequilibrios externos (grandes déficits en cuenta corriente) e internos (grave déficit fiscal, desempleo e inflación), la falta de competitividad y las restricciones estructurales.
En Asia meridional, el crecimiento se debilitó hasta un estimado del 5,4% en 2012 (7,4% en 2011), principalmente como resultado de una abrupta desaceleración en India, donde el crecimiento del PIB (medido al costo de los factores) se proyecta en 5,4% para el ejercicio que finaliza en marzo de 2013. Se pronostica un crecimiento del 5,7% en el PIB regional durante el año calendario 2013.
El crecimiento del pib de américa latina y el caribe se redujo a 3%
El crecimiento del PIB de América Latina y el Caribe también se redujo a un estimado del 3% en 2012 (a partir del 4,3% en 2011), a causa de la marcada contracción de la demanda interna en algunas de sus economías más grandes y al debilitamiento del entorno internacional, señala el informe “Perspectivas Económicas Mundiales del Banco Mundial (BM)”. Añade que Brasil, la principal economía de ALC, se expandió solo alrededor del 0,9% en 2012. Se espera que un entorno normativo más flexible, flujos de capital más estables (principalmente de inversión extranjera directa) y un alza en la demanda externa impulsen el crecimiento regional a un promedio del 3,8% durante 2013-15.
Por otro lado, el crecimiento en la región de Oriente Medio y Norte de África aún está afectado por la incertidumbre política y los disturbios en varios países. Se estima que el PIB regional creció en 3,8% en 2012 (luego de una baja del 2,4% en 2011). El producto regional disminuiría a 3,4% en 2013, para luego subir
a 4,3% en 2015, se concluye.