Las gobernaciones invertirán menos en proyectos productivos (1% en industria) y más en transporte durante este 2015, gestión que se caracteriza por la elección de nuevas autoridades que lidiarán con diversos desafíos económicos.
Según datos oficiales, el presupuesto total asignado a las nueve gobernaciones asciende a Bs 14.631 millones, de los cuales 11.664 millones (79,72%) son para la gestión departamental, mientras que el saldo (20,27%) corresponde a gastos delegados.
Según el estudio de la Fundación Jubileo “¿En qué gastarán el dinero los gobiernos departamentales el 2015”, este año las gobernaciones tienen programado invertir en 2.165 proyectos.
La prioridad en este 2015, al igual que en años anteriores, sigue siendo el sector de transportes, principalmente caminos, que concentrará el 34% del total de los recursos de inversión departamental; le siguen el sector agropecuario (23%); energía, “básicamente electrificación rural” (9%); urbanismo y vivienda (8%); turismo (2%); e industria (1%).
Las gobernaciones deben invertir en infraestructura, ya sea transportes, telecomunicaciones o energía, porque es “aquello que requiere el sector privado para desarrollarse”, expresó el analista Armando Méndez, quien también identificó a la salud y educación como sectores prioritarios para la asignación pública de recursos, la cual afecta directamente a la calidad de vida de la población.
“La interconexión caminera es fundamental, pero también lo son las inversiones productivas agropecuarias e industriales. En el primer caso, la asignación de recursos ha subido un poco, pero en el segundo se mantiene en 1%, pese a que, al igual que el turismo, está agendado en la Constitución para diversificar la economía a otros sectores que generen mayor valor agregado, ingresos y empleo”, dijo René Martínez, analista de Jubileo.
El Artículo 321 sobre “Política Fiscal” de la Constitución establece que las asignaciones públicas “atenderán especialmente (…) al desarrollo productivo”, mientras que el 306 sobre “Organización Económica del Estado” determina que “el Estado asegurará el desarrollo mediante la redistribución equitativa de los excedentes económicos (…) en la reinversión en desarrollo económico productivo”.
La Ley Marco de Autonomías y Descentralización señala asimismo el desarrollo productivo como función del nivel departamental.
El Gobierno busca consolidar hasta 2025 el desarrollo industrial de cuatro sectores productivos: minería, hierro, gas y recursos evaporíticos con el objetivo de exportar productos con valor agregado.
“Invirtiendo el 1% en industria es imposible que lleguemos a construir un país industrializado como se quiere”, apuntó Martínez, antes de explicar que la mayor inversión en proyectos de transporte tiene que ver con el pesado marco regulatorio que hay en el país y las limitaciones técnicas del personal de las gobernaciones. “Las inversiones productivas requieren mucho más ingenio, planificación y estudios de mercado”.
Jubileo destaca también que este año las gobernaciones deben lidiar con un posible recorte de recursos, producto de la caída del precio del petróleo, la aprobación de sus estatutos autonómicos y la negociación del pacto fiscal, que permitirá generar mayores recursos vía impuestos y otros ingresos.
“Hay que hacer una evaluación general de todas las inversiones, de las departamentales, municipales y las del Gobierno central”, sostuvo Méndez. “La pregunta que debería hacerse es: ‘¿Realmente el sector público está asignando eficientemente o no sus escasos recursos?’”.