Marcelo Trigo: ‘Los bancos necesitan una norma que estimule la innovación’
El 4 de abril, Marcelo Trigo, gerente general del Banco de Crédito BCP, fue posesionado como presidente de Asoban para la gestión 2018-2019. El ejecutivo liderará la institución en un momento en el que la banca afronta grandes retos, como el cumplimiento este año de las metas mínimas finales de cartera de crédito productivo y de vivienda de interés social y el diseño de un nuevo escenario que permite mantener el dinamismo del sector en el corto y mediano plazo.
— ¿Cómo enfocará el trabajo de Asoban durante su gestión?
— Asumo este cargo con satisfacción por representar a la banca asociada y, a la vez, como un importante desafío por los retos que encara el sector. Asoban tiene algo más de 60 años de vida, es una organización sólida que ha fortalecido sus bases institucionales contribuyendo a las actividades transversales de sus asociados. Por lo tanto, representar a uno de los sectores más importantes del país es una enorme responsabilidad.
— ¿Cuáles son las principales metas que se propone para la institución en ese tiempo?
— El principal objetivo de mi gestión será continuar propiciando el diálogo constructivo, contribuyendo con ideas que favorezcan la conservación de un sistema financiero sólido e inclusivo e incorporando innovación y mejores prácticas, siempre apegados al cumplimiento de las leyes. De ese fértil campo han surgido muchos entendimientos constructivos entre banca, gremios y Gobierno. La banca es un rubro innovador y, para ello, requiere de un marco regulatorio que impulse esta virtud, que permita que las entidades financieras diseñen y ofrezcan cada vez mayores facilidades de acceso y uso de los servicios financieros; así, otro de los retos es propiciar el acompañamiento de la innovación con la regulación.
Por lo tanto, es importante trabajar apoyando al regulador en beneficio del consumidor financiero, lo que traerá muchos beneficios, como seguridad, accesibilidad, interoperabilidad, uso efectivo de tiempos y reducción de la fricción para el acceso a servicios financieros. El cumplimiento de las metas de cartera es otro reto particularmente importante para este año (…). En lo interno, continuaré impulsando el fortalecimiento de los lazos entre los miembros de la Asociación, contribuyendo en aquellas actividades transversales que permitan la reducción de los costos operacionales, manteniendo la política de fomento a una sana competencia y permanente diálogo, continuando con el legado de mis predecesores en el fortalecimiento y crecimiento de Asoban.
— ¿Cómo encuentra la banca boliviana al asumir el cargo?
— En los últimos años, el sector se ha caracterizado por mantenerse dinámico, aunque durante 2017 se evidenció un menor ritmo de crecimiento de la cartera (12,8%) y de la rentabilidad, así como una mayor presión sobre el margen financiero. A partir del establecimiento de las metas de cartera, la banca ha realizado importantes esfuerzos para alcanzarlas. A nivel agregado, en 2017, más del 55% de la cartera se concentró en sectores regulados, proporción que se situó por encima de la meta intermedia fijada. No obstante, también se observó decrecimiento de cartera en los sectores comercial y de servicios. Asimismo, la banca generó utilidades por $us 298 millones, 2% menos que en 2016, resultado que responde principalmente a la mayor presión sobre el margen financiero. De hecho, este margen creció 6,3%, 3,1 puntos porcentuales menos que en 2016 y distante de la expansión observada años atrás. No obstante, el sistema bancario continuó manteniendo su liderazgo, solvencia y fortaleza patrimonial, producto de la eficiencia de gestión y la reinversión de utilidades, las que permitieron continuar obteniendo resultados positivos. Es destacable también la confianza del público, la cual se sustenta en el trabajo interno realizado por los bancos. Es así que, en 2017, se observó dinamismo en los depósitos. La fortaleza patrimonial de los bancos ($us 2.127 millones) es producto de la continua reinversión de utilidades, cuyo efecto directo sobre la expansión del crédito es evidente. Igualmente, la inclusión financiera es un concepto en el que los bancos han trabajado y continuarán haciéndolo. Al respecto, cabe destacar algunos indicadores como el continuo aumento del número de cuentas, que en 2017 sumaron 9,1 millones, 826.000 más que en 2016. Para 2018 esperamos mantener el ritmo de dinamismo, así como alcanzar las metas de cartera establecidas para el sector, aunque, al mismo tiempo, consideramos que el diálogo será vital en este periodo que requiere de adaptación y flexibilidad (…). La atención a los sectores productivos y de vivienda social no debería afectar a otros rubros relevantes para el crecimiento de nuestro país como el comercio y los servicios, los cuales debemos continuar atendiendo, en línea con la inclusión financiera de todos los actores de la economía y de la población en general.
— ¿Cree que todos los bancos del sistema serán capaces de alcanzar este año las metas mínimas de cartera productiva y de vivienda de interés social?
— Como señalé, en la pasada gestión más del 55% de la cartera se concentró en los sectores regulados, superando la meta intermedia fijada, y durante los primeros meses de este año se observa que esta orientación continúa. El compromiso de la banca con relación al cumplimiento de las regulaciones se mantiene.
— ¿Cuáles son las perspectivas para el crédito pyme?, que según información de la Asfi se estancó la pasada gestión por cuarto año consecutivo.
— Si bien el crecimiento del crédito para la pequeña y mediana empresa (pyme) ha sido modesto en los últimos cuatro años, esta cartera representa el 14% de la cartera del país ($us 2.900 millones). Esperamos que hacia adelante el crédito pyme retome el dinamismo de años pasados.
— ¿De qué manera se mantendrá el dinamismo del crédito y cómo cambiará éste luego de haberse alcanzado las metas mínimas de cartera?
— El dinamismo del crédito depende de varios factores, no solo de la oferta crediticia con la que cuenta la banca. Se deben incluir factores de demanda crediticia de la población, la cual debe ser calificada sobre la base de los requisitos que la propia normativa establece. A su vez, el dinamismo del crédito es un resultado del crecimiento económico. En este sentido, mientras se mantenga la expansión económica en el país, se mantendrá el dinamismo del crédito.
— ¿Considera que el actual Gobierno ha focalizado el desarrollo del país en el crédito?
— El sector financiero es un pilar fundamental del desarrollo de todos los países, por lo que los gobiernos y reguladores en el mundo se preocupan por su estabilidad y fortalecimiento. A su vez, la banca tiene ese rol dinamizador de la economía, por lo que el Gobierno la identifica como uno de los brazos articuladores para reorientar la matriz productiva del país. Estas políticas han sido practicadas a lo largo de la historia del país y hoy son nuevamente planteadas priorizando la colocación del crédito en los sectores productivos, abriendo enormes oportunidades para el desarrollo de estos rubros.
— ¿Qué oportunidades y riesgos ve en esta decisión?
— Es importante considerar la propia estructura económica en determinadas regiones, en las que sectores como el comercio y servicios tienen una dinámica propia y, sin duda, también contribuyen al desarrollo de las economías de esas zonas, aportando al crecimiento, y algo que es fundamental, integrando la cadena de pagos. Es, por lo tanto, importante no debilitar esa cadena de pagos y atender a todos los sectores en su demanda crediticia en función de su dinámica.
Pérfil:
Nombre: Marcelo Trigo
Profesión: Economista
Cargo: Presidente de Asoban y Gerente General del Banco de Crédito BCP
Experto en economía y finanzas
Obtuvo su licenciatura en Economía en la Universidad de Notre Dame (EEUU) y su maestría en Administración de Empresas con enfoque en Finanzas en la Universidad de McGill (Canadá). Cuenta con más de 20 años de experiencia en el rubro, tiempo que incluye su paso por empresas como Citigroup, CN Investments y Credicorp. Actualmente, también es miembro de los directorios de Credifondo, Credibolsa, Inversiones Credicorp y Crediseguro.