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La CEPB, entre dos visiones

Este miércoles, ocho federaciones departamentales y 18 cámaras o asociaciones empresariales elegirán al nuevo presidente de la CEPB entre dos candidatos con perfiles muy diferentes, lo que coronará un peculiar proceso que también enfrenta dos visiones.

Desde su creación en 1962, la mayor patronal de Bolivia ha acompañado con distintos matices el desarrollo económico y social de Bolivia, participando muchas veces de los cambios estructurales que enfrentó el país, como los que ocurrieron luego de la crisis de 2003, que finalizó con la huida de Gonzalo Sánchez de Lozada y la asunción al poder de Evo Morales.

En todo ese periodo, la Confederación de Empresarios Privados (CEPB) fue presidida por Ronald Nostas (2015-2017 y 2017-2019), Daniel Sánchez (2010-2012 y 2012-2015), Gabriel Dabdoub (2008-2010), Roberto Mustafá (2004-2006 y 2006-2008) y Carlos Calvo (1989-1992, 2000-2002 y 2002-2004).

En los comicios de este miércoles se elegirá al nuevo titular de la institución entre Marco Antonio Salinas, presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), y Luis Barbery, presidente de la Federación de Empresarios Privados de Santa Cruz (FEPSC), la cual no es parte de la CEPB desde 2004, cuando el sector abandonó la coalición en rechazo a que la dirigencia de entonces aceptó los nuevos impuestos propuestos por el Gobierno y tras recibir críticas por su “visión regional”.

Barbery aspira ahora a la presidencia de la Confederación no como titular de la FEPSC, sino como miembro de la Cámara de Industria, Comercio, Servicios y Turismo de Santa Cruz, la cual está afiliada a la Cámara Nacional de Industrias, que a su vez es parte de la CEPB.

“Después de mucho tiempo, se han presentado dos candidaturas: una del occidente y otra de oriente (…). Las diferencias fundamentales entre Barbery y mi persona son que mi visión es nacional y la de él es regional, y que yo tengo experiencia en la Confederación (Segundo Vicepresidente de la CEPB en la primera gestión de Nostas) y él no”, sostuvo Salinas.

Este medio llamó en reiteradas ocasiones al titular de la FEPSC para conocer su posición sobre estas elecciones y sus propuestas, pero no atendió su teléfono móvil.

PROCESOS. La última vez que se perfilaron dos postulantes a la dirección de la máxima patronal nacional fue en 2010, cuando Sánchez asumió el cargo luego de que Mustafá retirara su candidatura antes de la votación, no sin primero declarar que “un ministro de Estado” —Luis Arce, según fuentes extraoficiales— manifestó su desacuerdo con una eventual presidencia suya y tras afirmar que su contrincante era el “preferido del Gobierno”, algo que fue rechazado por el ya titular de la organización.

Notas periodísticas reportan que al interior de la CEPB había en ese entonces preocupación por una elección de Mustafá, debido a su postura “radical”, que perjudicaría el diálogo con el Ejecutivo.

Salinas es reconocido también por tener una actitud crítica frente al Gobierno, aunque el empresario paceño aclaró que esta posición es “técnica” y “basada en estudios económicos”. “En ningún caso soy opositor al Gobierno, yo no hago política”, subrayó.

Barbery, por su lado, se mostró en los últimos 12 meses favorable a proyectos gubernamentales en suelo cruceño, como la producción de biocombustibles, el uso de la urea de YPFB en el agro del departamento y la reactivación de Puerto Busch, así como a la cuarta adenda al contrato de compraventa de gas a la Argentina, según la agencia estatal ABI.

Para lograr “equilibrio” entre las “regiones con crecimientos importantes” y las que tienen “bajo crecimiento”, Salinas planteó un plan de trabajo de seis ejes: el diálogo con el Ejecutivo sobre la base de una agenda que incluya a los sectores y las regiones; la aplicación de incentivos fiscales para direccionar la inversión a departamentos con problemas de crecimiento; la elaboración conjunta de un plan nacional de empleo; el fortalecimiento de las regiones a través de fondos públicos o incentivos fiscales; y el fortalecimiento institucional de la CEPB.

“No va a ser una elección fácil (…). Los dos candidatos son empresarios muy reconocidos y respetados, son líderes empresariales fuertes, con mucho conocimiento, con mucho compromiso”, dijo Nostas, quien espera que “ganadores y perdedores se mantengan unidos y que respeten la decisión de la mayoría”, para que el empresariado siga generando “riqueza, empleos, impuestos y bienestar”.

El sector hoy cuenta con la “madurez” para entender que su “verdadero rol no es hacer política partidaria”, sino “dedicarse exclusivamente a contribuir con su rol económico y social en el país”, dialogando con la autoridad que el pueblo elija, agregó.