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La recuperación de la economía, sin un plazo claro

¿Hasta cuándo se esperará para que la economía nacional se levante tras la crisis del coronavirus? El reto del gobierno de Luis Arce es titánico. Un economista y dos empresarios sugieren prudencia y esperar las señales económicas del nuevo mandato.

“El deterioro es muy fuerte. Con las cifras que hemos visto, salir de la crisis, para retomar el nivel de crecimiento, nos va a demandar entre uno y medio y dos y medio años. Va a ser un trabajo duro”, afirmó el 2 de noviembre el presidente Luis Arce,  en entrevista con el diario mexicano La Jornada.

Para el economista Horst Grebe, las estimaciones del tiempo que tomará superar la recesión se las debe asumir con “cautela”, porque depende de las medidas que aplique el nuevo Gobierno y su estrategia de reactivación.

“Creo que estas predicciones o estimaciones de la duración del proceso crítico que estamos atravesando no son ninguna afirmación contundente y definitiva, lo único que están haciendo es decir que va a durar mucho. Y esto también ocurre a nivel internacional, los organismos internacionales, los analistas más renombrados, todos coinciden en que no va a haber una recuperación inmediata de la recesión”.

Por ejemplo, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), en su estudio Políticas macroeconómicas activas para la recuperación y transformación económica y social, de octubre, indica que el impacto del coronavirus en la economía de Latinoamérica será mayor de lo que se esperaba, y la recuperación más lenta de lo que se pensaba, es decir, recién en 2025 podrían alcanzarse los niveles que existían en 2019.

Por ello, según Grebe, que la economía nacional comience a levantar cabeza puede demorar más allá de 2022. “Entonces no hay que tomar al pie de la letra lo que quieren decir. Que nadie espere que en un corto lapso haya un retorno a la normalidad previa”.

En criterio del presidente de la Cámara Nacional de Industrias (CNI), Ibo Blazicevic, la recuperación depende de las acciones que lleve adelante el nuevo Gobierno en materia económica, pero sobre todo de las condiciones adecuadas que pueda generar para la participación de la inversión extranjera en sectores estratégicos para el desarrollo del país.

Una de las claves estará en brindar estímulos

Gas. Uno de los sectores que requiere de ingresos, sobre todo para exploración, es el de hidrocarburos. Foto: Vicepresidencia Archivo

En criterio del economista Horst Grebe, las acciones clave para la recuperación de la economía se concentrarán en brindar estímulos adecuados a las empresas para que comiencen a producir  y generar empleos.

“Por otro lado, hay que generar la capacidad adquisitiva de la gente para que pueda comprar los productos que empiecen a aparecer en el mercado. Entonces, hay que ir a las dos variables, tanto a la oferta como a la demanda, y eso tiene que ocurrir más o menos en simultáneo”.

Asimismo, recomendó a las nuevas autoridades del Gobierno no efectuar “un corte abrupto del gasto”, porque puede afectar en el crecimiento.

Para los industriales, impulsar la economía requiere mercados, que están muy contraídos por culpa del COVID19. “Necesitamos reactivar la demanda específicamente.  Y para llegar a niveles aceptables que se tenían en 2019, lo primero que se debe hacer es reactivar la demanda de los sectores que tienen todavía bajos niveles de demanda, o incluso hay actividades económicas que ni siquiera están empezando o son incipientes, como el caso del turismo”, dijo el presidente de la Cámara Nacional de Industrias (CNI), Ibo Blazicevic.

Agregó que el presidente Luis Arce, apenas asuma sus funciones, debe ocuparse de que todos los sectores de la economía, cumpliendo con las medidas de bioseguridad, vuelvan a trabajar. “Debemos protegernos de un rebrote del coronavirus que podría hacer que nuevamente cerremos fronteras y cerremos la economía”, advirtió.

Similar criterio fue expresado por el gerente de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), Gustavo Jáureguí, al señalar que mientras no se tenga la certeza de cuándo concluirá la pandemia, con la llegada de una vacuna, es difícil programar una recuperación, más aún cuando se habla de un rebrote, como sucede en países de Europa.

“Me parece que está todo en función de las señales que demos, me refiero a las señales que se den a partir de la posesión, a partir de la conformación del gabinete, especialmente del económico y eso es importante. Y luego de las señales que damos al mundo en el sentido de que se generen las condiciones adecuadas en Bolivia para un ambiente propicio para la inversión extranjera, no solamente en el ámbito extractivo, como se ha hecho en el pasado; también se busca inversiones, bolivianas y extranjeras, en otras áreas de la economía como el turismo, industria, construcción, creo es posible. Hay que pensar también en reactivar los proyectos dormidos como el del litio y el Mutún”.

El empresario agregó que para mostrar esas “señales” será importante un trabajo conjunto entre el sector público y privado. “Creo que esta es una época en que ya el Estado no tiene las espaldas que tenía antes y hoy la mirada debería ser de un aproximamiento, de un trabajo conjunto público-privado, de asociaciones público-privadas para encarar proyectos importantes y estratégicos”.

Mientras que para el gerente de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), Gustavo Jáuregui, es “complicado” proyectar cuándo se levantará la economía por un simple factor, que no es controlable: tener la certeza de cuándo llegará al país la vacuna para frenar la pandemia. “Una vez teniendo ese indicador, que nadie lo tiene y nadie lo puede controlar, sería mucho más fácil proyectar cuándo se puede reactivar la economía”.

Foto: Archivo

PROCESO

La Organización Mundial del Comercio (OMC) prevé que la reactivación económica se verá reflejada pasado el primer trimestre de 2021, considerando que este año se obtenga la vacuna, sin embargo el proceso continúa, recordó el ejecutivo. No obstante, expresó su confianza en que a través de la inyección de recursos externos se pueda empezar a dejar la recesión, tal como lo anunció Arce en la campaña.

“El nuevo Gobierno está habilitando la posibilidad de acceder a recursos de financiamiento externo.  Entonces ya contando con esos recursos para inyectar liquidez, tanto a la oferta como a la demanda, se coadyuvaría a la reactivación”, subrayó el empresario.

La crisis “va a durar más de lo que se pensaba y va a haber efectos en el crecimiento, en el desempleo, la desigualdad y la pobreza que van a ser más largos de lo esperado”, afirmó el mes pasado la secretaria ejecutiva de la CEPALl, Alicia Bárcena, con tono de incertidumbre, que domina al mundo.

Está claro que uno de los principales desafíos de Arce es la economía, y en una entrevista con LA RAZÓN, tras su victoria en las elecciones, admitió que los números son preocupantes, incluso más que los que tenía el país cuando el MAS asumió el poder en 2005, por lo cual será un “reto intelectual” superar esto, para él y su gobierno.