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El ‘sirwiñakuy urbano’ se erotiza en un filme nacional

Romance, obsesión y tensiones; esos y otros sentimientos cobran vida en la película Sirwiñakuy, filmada en La Paz por la directora estadounidense Amy Hesketh. La cinta se presenta desde hoy en la Cinemateca, Megacenter y Multicine.

Sirwiñakuy es una palabra del aymara que quiere decir unión libre y ésta es «la historia de un sirwiñakuy urbano», afirmó la directora quien gestó la idea del filme hace varios años. Pero para entender el sirwiñakuy, Hesketh investigó lo que representa esta costumbre en la cultura andina.

Sirwiñakuy narra la historia de una pareja, Beto y Anouk, que se conoce en un café paceño. «Ambos deciden irse a vivir juntos». A partir de allí se desarrolla una historia de amor con tintes sadomasoquistas, que explora las dimensiones de una relación obsesiva.

La película fue rodada en tiempo récord en La Paz bajo la producción del boliviano Jac Ávila, quien también asume el papel protagónico masculino. «Se muestran paisajes como los de la feria de El Alto, la geografía de La Paz; además filmamos en la casa de la poeta Yolanda Bedregal», aseguró la directora.