«¿Qué te ha pasado hermanito?» le dijo al pie de su féretro otro pepino que acudió al entierro en el Cementerio General. «Ni modo…, te dejamos y nos vamos por nuestras novias», agregó el pícaro, miembro del grupo T & G, invitado por Los Fanáticos, comparsa delegada este año para sepultar al personaje del Carnaval paceño. Y así fue, en presencia de miles de espectadores.
«La tradición dicta que el domingo de tentación se entierra al Pepino en señal de que termina el Carnaval. Definitivamente el Pepino no puede ser enterrado otro día que no sea en domingo de tentación», explicó Javier Escalier, presidente de la Asociación de Comparsas del Carnaval Paceño.
Aunque aseguró que entiende las razones, Escalier lamentó que la Alcaldía suspendiera este año las presentaciones públicas, por lo que adelantó que se solicitará «una norma» para que se respete el calendario festivo, considerando su impacto en la economía, tanto de la ciudad como de los comparseros. Un ejemplo, dijo, es el cambio de fecha para la realización del Jiska Anata. 25 comparsas, que habían previsto su presentación, se vieron afectadas, porque perdieron la inversión que habían hecho de inicio.
«Nuestros pasantes (anfitriones de la fiesta) adelantaron dinero a la banda, al local y a las orquestas, esos recursos no se pueden recuperar, no los devuelven y los grupos quedaron molestos. La verdad, nosotros no vamos a participar de la entrada de abril», explicó David Conde, fraterno de Los Recordados Chutas de Antaño, acerca de la nueva fecha prevista por la Alcaldía, a raíz del deslizamiento en La Paz.
Los comparseros coincidieron en que adicionalmente se deben tomar en cuenta otros factores como el costo de los trajes. Así, uno de pepino cuesta 120 dólares y la vestimenta de un Chuta y su pareja, incluso Bs 3.000. Las bandas de las fraternidades, el comercio informal generan también un gran movimiento económico que en este año se vieron afectados por la suspensión de actividades.
«Nosotros hemos cooperado, decidimos no hacer la entrada, pero nunca hubo falta de solidaridad» con los afectos, aseguró el chuta Gróver Esprella, mientras que durante el sepelio, Escalier pidió: «déjennos a los folkloristas bailar, hacer lo que sabemos, que es mostrar nuestras expresiones culturales».
Originalidad
Diseños propios
Los pepinos diseñan sus trajes, la combinación de colores y la forma de sus caretas.
Comercio Informal
Los puestos se ofertaban ayer entre Bs 20 a 30, según el lugar.
Bebida Infaltable
Mozos servían cocktelitos que deleitaron a los miles de bailarines a su paso por el lugar.