Ismael Serrano está en Buenos Aires. El jueves cantará en Santa Cruz y el sábado en el teatro 16 de Julio de La Paz. Las entradas se las puede reservar a través de SuperTiket.
– ¿Qué espera de su público en Bolivia, tras 10 años de ausencia?
Esto es enfrentarse a un público nuevo, una aventura nueva, una nueva oportunidad de presentarse en tu país. Hay una incertidumbre que se tiene porque al final uno no sabe el nivel de conocimiento que pueda tener la gente de mi música, porque uno no sabe la recepción y espero encontrar a alguien que comparta la propuesta, las inquietudes que uno tiene con las canciones. Hasta que uno no esté allí es difícil saber qué ocurrirá. En cualquier caso, mi carrera en otros países se ha desarrollado en forma natural. Es decir, la carrera de un cantautor no se basa en un hit radiofónico, en un momento mediático puntual, sino que es algo que se va construyendo con el tiempo, con la calma necesaria, con dedicación, con un repertorio, con una trayectoria y eso requiere echar la guitarra al hombro
– ¿Cuál el menú que trae a Bolivia para estos recitales?
Estamos ahora mismo con la presentación de un disco que se llama ‘Todo empieza y todo acaba en ti’. Es un disco que hace referencia a la necesidad de buscar el camino hacia un lugar soñado, quizá una llamada de buscar soluciones. Fundamentalmente estamos presentando este manojo de canciones y haremos un repaso de toda mi discografía, desde mi primer disco hasta el último. A mí me cuesta mucho entender los conciertos como una sucesión de canciones, a mi me gusta dialogar, en cierto modo, con el público, contar historias. El cantautor tiene mucho de juglar.
– ¿Qué músicos vienen contigo?
Voy con Jacobo Sureda, pianista, que también es productor del nuevo disco. Vengo con Javier Bergia que es como parte de mi familia, es un músico multiinstrumentista por así decirlo. Los músicos vienen con un formato muy acústico.
– ¿Cómo será la escenografía de tu concierto?
Me gustan que los conciertos tengan cada vez un carácter teatral y ahora queremos recibir a la gente en un pequeño espacio y generamos el ambiente de un café, el café de los recuerdos a donde invitamos a la gente a pasar y compartir las historias y los recuerdos. Recreamos el ambiente para dialogar.
– ¿Qué otras actividades realizarás en Bolivia?
Va a ser una visita bastante fugaz, ojalá tengamos más tiempo para visitar Bolivia con más calma. En esta ocasión sólo vamos a presentarnos.
– ¿Qué planes a futuro? ¿Por dónde continúa la gira?
Después de Bolivia, regresamos a la Argentina, donde estamos en estos momentos para terminar la gira por aquí, para terminar este primer tramo de la gira por Latinoamérica, luego volvemos a España y estaremos cruzando varias veces el Océano. Nos queda mucho por recorrer en Latinoamérica y España. Nos quedan muchos viajes porque acabamos de comenzar.
– ¿Cuál tu criterio sobre Bolivia y los procesos políticos que se dan en esta parte del mundo?
Es un momento que está sucediendo en toda América Latina. Son momentos cruciales los que se viven en continente en la búsqueda de su propio modelo y de su propia identidad. Se ha generado cambios políticos sumamente interesantes que ahora tienen que dar respuesta a las aspiraciones a la confianza que mucha gente ha depositado en los políticos que tienen que estar a la altura de las circunstancias. Se traque los cambios que se registran en los países sean realmente estructurales, sostenibles y que perduren en el tiempo. Ese debe ser el reto del político, Llegar más allá del horizonte electoral y ser capaz de comprometerse con su propio país.
A mí me parece sumamente importante el ejercicio de soberanía que vienen haciendo muchos países latinoamericanos, incluida Bolivia, al plantear un modelo propio, diferente. Me parece que es enriquecedor para el debate de las ideas, un debate que nosotros, como españoles y europeos también deberíamos recuperar. Deben existir alternativas frente a los ajustes. Las alternativas son una responsabilidad de los políticos para ofrecérselas a los ciudadanos.
–¿La crisis de España se comenta mucho aquí? ¿Qué piensa Ud?
Lo peor de la crisis son los ajustes. Esta es una crisis que comenzó siendo financiera y que la carga de este sistema descontrolado ha recaído en los Estados y de allí a la ciudadanía, y lo peor de todo –más allá de la crisis económica y de los ajustes– es la devaluación de la democracia porque parece que la soberanía ha dejado de residir en la ciudadanía que ya no es consultada sobre los cambios que se están produciendo. Nuestra ciudadanía está perdiendo el protagonismo político que realmente merece.
Nosotros hace poco asistimos a uno de los momentos más patéticos de la historia de España, que fue cuando el presidente Mariano Rajoy salió en rueda de prensa a decir que no tenía alternativas, que no tenía margen de maniobra y que poco podía hacer más allá de la agenda de ajustes de Europa. Que un político asuma su incapacidad públicamente o su incompetencia y que no convoque a elecciones, a mi me parece preocupante. Vivimos el chantaje del mercado y como resultado se está produciendo la anonimación de una ciudadanía que exige alternativas a los políticos que han fracasado en su proyecto de país.