Icono del sitio La Razón

‘No me voy a vestir de rosa para decir que soy gay’

— ¿Cómo se siente al estar en la televisión y en la radio?

— Me siento muy contento y también tengo miedo como principiante en este cargo, pero todo depende del equipo y lo tengo; también el apoyo y la confianza de la red. Los cambios se verán con el tiempo. En la radio estoy con el programa El clóset de Alisha, por Doble 8 Radio, y es un espacio para buscar a nuevos líderes jóvenes y es conducido por una transformista, lo que se da también por el imaginario radial. Son dos cosas diferentes que hago a nivel laboral.

— ¿Siente que los medios se están abriendo a los homosexuales, lesbianas y transformistas?

— Creo que todavía no. Son pocos los espacios que se abren, pero no sólo para la gente que es gay, transformista o lesbiana, sino para los jóvenes en sí. Creo que ven que los chicos no están bien formados y, además, que ahora no están asumiendo muchas responsabilidades: tienen 30 años y siguen viviendo con sus padres y así es difícil que la sociedad confíe en nosotros y se nos vea como líderes.

— ¿Usted se considera un líder entre los jóvenes y dentro del movimiento LGBT?

— Soy una persona que generó esa posibilidad, pero de una forma muy natural; no puedo autonombrarme así. Todo se ha dado por una necesidad de lucha para establecer derechos y se me dio la oportunidad de sacar la cara, y decidí hacerlo público en los medios de comunicación. Yo no quería generar un discurso, sino que se vea que mi sexualidad es espontánea y que no necesito encajar en estereotipos para establecer quién soy. No me voy a vestir de rosa para decir que soy gay, puedo ser economista o lo que sea siendo gay.

— ¿Fue difícil asumir su sexualidad ante la familia y los amigos?

— Hasta ahora no es fácil porque nuestra sociedad es conservadora y no te dice las cosas de frente. Te das cuenta de que no toda la gente está preparada y de pronto escuchas: “mirá ese mariquita”, pero creo que es un proceso de formación y de diálogo.

— ¿Se puede decir que Alisha es otro Andrés Mallo?

— Alisha es ese otro personaje que creé y me ayudó a entenderme y asumir lo que soy como persona. De pronto hemos sido (la familia Galán) representantes de la cultura y responsables de incluir a los excluidos. No sólo tocamos temas de sexualidad, sino que también tomamos posición en otros temas que nos interesan a todos.

— ¿Es difícil ser gay?

— Sí, yo me veo y creo que fui por un camino complicado. Sencillo es ser un chico de clóset, pues el visibilizarte ante la sociedad cuesta. Pero si no lo haces y no luchas, no estaría donde estoy. Creo que soy responsable con lo que soy, con lo que hago, pese a ser complicado. Y creo que aún va a seguir siéndolo.

— ¿Qué hace falta?

— Respeto, no ser tan individualista, mostrarle al otro que con respeto se puede construir una sociedad. Cuidando también de que nuestras acciones no hagan daño al otro.

— En la televisión usted no encasilla en los estereotipos, ¿cómo le hace sentir?

— Creo que es una buena manera de abrir el camino para desmitificar el tema de que debes tener ciertos elementos para ser gay, se debe construir esos espacios en una sociedad que necesita hablar y espero que seamos más.

— ¿Qué les dices a los homofóbicos?

— Que se fijen en sus vidas (ríe). La vida es muy corta como para estar mirando al otro, debes ocuparte de ti.

— ¿Está enamorado?

— Sí, desde hace siete años. Mi pareja no vive en el país, pero es una relación estable, linda y armoniosa.