En la actualidad, La Paz acoge seis museos municipales y dos de ellos tienen más de 60 años de antigüedad, desde sus orígenes como monumentos paceños y espacios culturales hasta la categoría que hoy ostentan.
Esas dos joyas de la cultura paceña son el Museo de la Revolución Nacional y la famosa Casa del prócer Pedro Domingo Murillo.
El de la Revolución Nacional, cuya fecha de inauguración como museo se remonta a julio de 1995, está ubicado en la popular plaza de Marte o Villarroel, casi junto a una de las paradas de la estación Blanca de Mi Teleférico.
Desde su construcción se proyectaba como Monumento a la Revolución de 1952 y la obra fue entregada en 1964 junto a los murales de Miguel Alandia Pantoja y Walter Solón Romero. El monumento fue ejecutado por el arquitecto Hugo Almaráz.
El Museo de la Revolución, se sitúa al finalizar la avenida Busch de la zona de Miraflores, es un museo dedicado a conservar la memoria histórica y el arte, fue inaugurado el 23 de agosto de 1964 en el tercer gobierno de Víctor Paz Estensorro. Se trata de la obra arquitectónica y pictórica edificada para recordar uno de los momentos mayores de nuestro pasado, la Revolución de 1952.
También se encuentra la cripta de los restos del presidente Juan José Torres, los del líder minero y gestor de la Revolución Juan Lechín y las urnas de Gualberto Villarroel y Germán Busch.
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Más de 60 años
El otro, el histórico museo Casa de Murillo en la pintoresca calle Apolinar Jaén de la ciudad de La Paz. Según la historiadora municipal Patricia Kuno, la expropiación de la infraestructura se hizo en 1944 y se inauguró el museo un 15 de julio del año 1950 como Museo, este año cumple 75 años.
Por estar edificado en una zona particularmente húmeda, la histórica casa precisa de un mantenimiento constante.
“Al estar en una zona principalmente húmeda, se tiene que hacer permanentemente un monitoreo y estamos pendientes en equipar anualmente para poder extraer el agua para el control correspondiente y que todos los bienes no se pongan en peligro ni deterioro y tenemos un conservador para todos esos aspectos”, detalló la responsable de museos municipales, Vania Coronado.
Los tesoros que alberga, además de las pinturas, topos, medallones, bastones de mando, cruces kallawayas, muebles, máscaras y chalupas; el recinto ampara la proclamación de la junta tuitiva de la revolución de 1809, obras pictóricas de Melchor Pérez de Holguín, otras obras del siglo XVII y XIX, también colecciones de platería religiosa y civil de antaño.
simbolismo El inmueble no era solo la casa del insigne paceño Pedro Domingo Murillo, en realidad era la morada del Cnl. José Ramón de Loayza, padrino de Murillo; allí Pedro Domingo habitó mucho tiempo y se refugiaba de las amenazas a las que era sometido. Por eso el simbolismo de la casa, muy visitada por paceños.
Se dice que Murillo se reunía en esos aposentos con los españoles por las mañanas y por las noches con los conocidos conspiradores.
Con el transcurrir de los años, la Casa de Murillo, paso a custodia de la Alcaldía Municipal para que cumpla las funciones de Museo de Historia Colonial. La inauguración fue el sábado 15 de julio. Contó con la presencia del Presidente Constitucional de la República, Mamerto Urrilagoitia, Ministros de Estado y miembros del cuerpo diplomático. Fue nombrado primer director del Museo, el profesor Max Portugal, quien ejerció el cargo por 34 años.
Murillo
La casona, de estilo colonial fue construida en el siglo XVII de conformidad a la arquitectura de la época. Se trata de una construcción de dos niveles de paredes de adobe y techo de tejas a dos aguas. La fachada ubicada en esquina, muestra 12 ventanas con enrejado y arco rebajado; posee balcones abiertos de hierro que descansan sobre canes de madera. Un balcón abierto con antepecho de madera tallada y 10 derechos de madera entorchados.
Pedro Domingo Murillo fue un destacado líder de la lucha por la independencia de Bolivia. Nació en La Paz durante el año 1757 y fue uno de los principales impulsores de la revolución de 1809. Murillo también fue reconocido como un talentoso pintor, dejando un legado artístico que se puede apreciar en la Casa de Murillo.
Hoy, el inmueble representa solamente la cuarta parte de lo que era la infraestructura de aquel caserío de Loayza y Pedro Domingo Murillo. Cabe mencionar que todos los espacios culturales del Gobierno Autónomo Municipal de La Paz fueron adquiridos de sus dueños. Debido al valor cultural e histórico de cada uno.
Los otros
Cuatro más completan el sexteto de grandes centros culturales paceños. Museo del Litoral Boliviano (1978), Museo Costumbrista Juan de Vargas (1979), Museo de Metales Preciosos (1984) y el conocido Museo Tambo Quirquincho (1988).
El complejo de museos en La Paz está conformado por los seis anteriormente citados, cuatro áreas de exposición. Así como un espacio de conservación y restauración, así como un archivo fotográfico.
Todos los museos abren sus puertas de martes a viernes de 09.00 a 12.30 y de 14.30 a 19.00. Los sábados en horario corrido desde las 09.00 a 17.00.
El balance de visitantes por año promedia de 30.000 a 40.000 personas que llegan a los recintos. Siendo el sector turístico y el de las unidades educativas y universidades los más masivos.
De hecho, cuatro de los muesos municipales están ubicados muy cerca el uno del otro, en el denominado complejo cultural de la calle Jaén. Costumbrista Juan de Vargas, Litoral Boliviano, Metales Preciosos y casa Murillo.
“La Alcaldía dispone un boleto único para el ingreso a estos espacios con un precio de Bs 8 para bolivianos, Bs 20 para extranjeros. Los niños ingresan gratuitamente”, manifestó Mónica Sejas, responsable de la Casa de Murillo
La gala llega cada año con la tradicional Larga Noche de Museos que el ejecutivo municipal lleva a cabo con la colaboración de artistas. Un evento al que la población no le resta su apoyo y acude masivamente en cada gestión.
Familias enteras visitan los espacios culturales municipales, no solo museos; también bibliotecas, archivos, teatros y muchos otros.