La soprano Karina Stepanian interpretará esta noche, junto a la Orquesta Sinfónica Nacional, nuevamente las canciones Preludio y muerte de la ópera Tristan e Isolde y Schmerzen, Traeume de la obra Wesendonck Lieder en el último concierto del ciclo dedicado a recordar los 200 años del nacimiento del destacado compositor alemán Richard Wagner.
Aunque la especialidad de Wagner fueron las óperas, el director titular de la orquesta, Mauricio Otazo, explicó que es difícil seleccionar canciones que puedan interpretarse en un concierto de una hora.
“La mayoría de sus composiciones son ‘dramas líricos’ que tienen entre dos y cuatro horas de duración. Es así que la mayoría de las piezas de esas obras están encadenadas entre sí y forman parte de una estructura continua”, explicó el director a La Razón.
Las otras obras que forman parte del programa son Viaje de Siegfried por el Rhein de la obra El Crepúsculo de los Dioses, parte del ciclo más conocido de Wagner, El anillo de los Nibelungos, al que también pertenece la Cabalgata de las Valquirias de La Valquiria.
La obertura de El Holandés Errante, el preludio del primer acto de Los Maestros Cantores de Núremberg y el preludio del tercer acto de Lohengrin cierran el recital de esta noche (19.30).